jueves, 17 de septiembre de 2015

Lámed



Hoy vamos a reflexionar sobre la letra Lámed, Salmo 119:89-96.

"Para siempre, oh Jehová, permanece tu palabra en los cielos." Versículo 89.
El salmista empieza de la misma forma que termina, declarando: Tu palabra señor es eterna.

¿Por qué esto es algo digno de resaltar?
Porque vivimos en un mundo de constantes cambios: las relaciones, nuestros intereses, la economía, la sociedad... No hay nada en lo que podamos aferrarnos, porque nada es estable. Y si lo hacemos, podría causarnos mucho daño.
Pero Dios, en su misericordia y conociendo nuestra fragilidad, nos regala algo que es constante y perdurable en el tiempo. SU PALABRA.
Siempre podemos confiar y asirnos de su palabra porque es eterna.


"De generación en generación es tu fidelidad; tu afirmaste la tierra, y subsiste." Versículo 90.
La FIDELIDAD de Dios también es eterna y constante, y gracias a eso el mundo que el creó sigue permaneciendo.
Porque Dios es FIEL, su palabra, sus mandamientos, sus promesas, sus buenas nuevas siguen teniendo el mismo valor desde que decidió escribirlas en la historia humana.

A pesar de nuestra necedad, su palabra se mantiene tal cual es, como resultado de su fidelidad.
Que su palabra sea perpetua va de la mano con que su fidelidad sea perpetua. Es una relación directa e inquebrantable.


"Por tu ordenación subsisten todas las cosas hasta hoy, pues todas ellas te sirven." Versículo 91.
Acá el salmista resalta la AUTORIDAD de su palabra. Todas las cosas se mantienen tal cual y están a la expectativa de lo que EL DICE.
Todo lo que sale de la boca de Dios es dicho con autoridad; ¡Esto es algo que se vió claramente en la vida de Jesús!
Dios no habla por hablar. Dios no nos deja un libro especialmente escrito por el, para que nos entretengamos en nuestros tiempos de ocio. Tampoco la creación se pone a reflexionar, antes de obedecer a alguna palabra dicha por el. Nuestro Dios tiene la autoridad que muchas personas en esta tierra, desean y trabajan por conseguir. 
Toda la naturaleza sigue existiendo, simplemente porque Dios lo dice. No se si entendemos realmente la importancia de esto.


"Si tu ley no hubiese sido mi delicia, ya en mi aflicción hubiera perecido. Nunca jamás me olvidaré de tus mandamientos, porque con ellos me has vivificado. Tuyo soy yo, sálvame, porque he buscado tus mandamientos." Versículos 92-94.
Esto es lo que pasa cuando una persona busca en Dios, lo que sabe que no puede encontrar en otro lado.
Su palabra tiene poder para sacarnos de nuestro pozo de tristeza y trasladarnos a un lugar de descanso y esperanza. Es capaz de abrir nuestra mente y hacernos ver que hay mucho más que lo que estamos sintiendo. Su palabra es capaz de darnos vida cuando nos sentimos sin fuerzas; nos da sentido y dirección. Su palabra nos muestra que con Dios podemos dejar de estar muertos espiritualmente.


"Los impíos me han aguardado para destruirme; mas yo consideraré tus mandamientos." Versículo 95.
Hay personas que van a querer literalmente dañarte, pero lo mejor que podes hacer en esos momentos es apoyarte en su palabra. ¿Por qué? 
Porque Dios nos dice qué debemos hacer en esas situaciones, y porque muchas personas pasaron por lo mismo y sus historias están en la Biblia. Busca el consejo oportuno en su palabra.


"A toda perfección he visto fin; amplio sobre manera es tu mandamiento." Versiculo 96.
Por último... y como empezamos, todo termina o se desvanece en algún momento; pero no ocurre así con su palabra. Porque su palabra es eterna.

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