Mostrando entradas con la etiqueta Mentiras. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Mentiras. Mostrar todas las entradas

lunes, 29 de agosto de 2016

Engaños



Perder la confianza, encontrarnos con la desilusión, caer en la realidad de que fuimos engañados no es una linda sensación. Encontrar que la persona en la que depositábamos nuestra confianza nos mintió es doloroso, genera una ruptura y habré un gran POR QUÉ, por qué lo hizo, por qué a mí, por qué cambió tanto...

Se han escrito miles de poesías, canciones acerca del engaño, pero hoy quiero hablarte desde otra posición, una que poco analizamos, Engañarnos a nosotros mismos.

Engañarnos a nosotros mismos es mentirnos, es no reconocer, es cerrar los ojos, es tener miedo a ver la realidad, una realidad que cuesta aceptar, que cuesta experimentar y vivir, que exige salir de la comodidad tal vez.
Cuando pensamos que podemos tomar nuestras propias decisiones, tenemos confianza en que todo nos va a salir bien, aún sabiendo que a Dios no le agrada lo que hacemos, nos estamos vendiendo algo que no es, una seguridad efímera como el humo y tan palpable como el arco iris.

Pensar que Dios luego nos perdona, que Cristo ya pago nuestros pecados y hemos sido salvos, que ahora podemos actuar como nos de la gana, no solo es mentirnos, es como si me casara y piense que mi esposa no se va a divorciar y por lo tanto puedo experimentar estar con otras mujeres, vivir con ellas o ir y venir. La gracia no esta para eso. Estamos lastimando a quien lo da todo por nosotros, herimos los sentimientos del padre amoroso y lleno de bondad.

Ahora bien, ¿deberíamos seguir pecando para que Dios nos muestre más y más su gracia maravillosa? ¡Por supuesto que no! Nosotros hemos muerto al pecado, entonces, ¿cómo es posible que sigamos viviendo en pecado? Romanos 6:1-2 NTV

¿Por qué creer que nos podemos conducir solos? ¿No estamos seguros al hacer la voluntad de Dios y obedecerlo?
La gracia actúa sobre aquellos que reconocen su error, reconocen la soberanía y sabiduría de Dios, piden auxilio en medio de la crisis.

La gracia nos debe impulsar a buscar, amar y enamorarnos más de Dios. ¿Por qué insistir en ensuciarnos cuando ser limpios costo tanto? No abusar de la gracia es valorar la cruz de Cristo.

No te engañes, no te mientas, no disfraces de bendición lo que hiciste con tus propias fuerzas, confía en Dios, hacer su voluntad aun es bueno, agradable y perfecto.

martes, 19 de agosto de 2014

¿Puede el cristiano ver películas de terror?



Tengo en claro que hay mucha diferencia de opinión en cuanto a este tema, y sé que pueden darse extensos debates, pero como cristianos nos regimos por una ley, que es la palabra de Dios.
Ésta dice en Efesios 5:11: "Y no participéis en las obras estériles de las tinieblas, sino más bien, reprendedlas. Otras versiones dicen: desenmascaradlas, impugnadlas, reprobadlas y redargüidlas."

Cuando hablamos del género “Terror” hablamos de un género cuyo objetivo es darte entretenimiento mediante el miedo. La Biblia dice que no debemos tener nada que ver con este mundo y los demonios (Rom 12:2, 1 Cor 10:20). Un sentimiento que te lleva a dudar de la seguridad y paz que te proporciona Cristo.
Paradójicamente, leemos versículos que nos motivan a confiar, a levantarnos el ánimo y a esforzarnos como puede ser: Josué1:9; Isaías 41:13, etc… y después ahogamos esto con películas que nos hacen tener miedo cuando apagamos la luz. A Dios no le agrada que dudemos de él.
Por otra parte sabemos que muchas de estas películas son basadas en hechos reales y mientras las vemos y nos asombramos al ver personas que no pueden ser exorcizadas o demonios que tienen gran poder, de cierta manera exaltamos y alabamos el poder de Satanás, cosa que para un hijo de Dios es inaceptable.
Otros géneros como el romántico, te llevan como objetivo central, el amor (siempre hablando de películas que pasen el filtro); las cómicas, a reír; pero el terror, lleva al temor a las obras de Satanás. Temamos solamente a Dios.
Este género terrorífico altera tus sentidos alimentando de cierta manera tu subconsciente, muchas veces incitándote a investigar o simplemente a tener presente todo el día esas imágenes satánicas en la cabeza.
Hay muchos casos de posesión demoníaca a través de oír palabras sin sentido. ¿Sabes qué significa cada palabra que recitan los “magos” para hacer sus “conjuros”? Podría citar testimonios de cineastas, pero no lo quiero hacer muy extenso.
Debemos saber que, entre más participación tenga Satanás en la película, más realista se verá…
2 Cor. 6:14 dice que no nos unamos en yugo desigual porque no hay compañerismo con la luz y las tinieblas, pasaje que usamos mucho para elegir pareja pero no para juzgar las demás cosas, que por demás está decir que somos luz.
Es bueno conocer de la obra de Satanás, siempre y cuando ésta sea alumbrada a través de la luz de las Escrituras.
Al cristiano le es de provecho pasar 120 minutos admirando la obra de Dios, que la de Satanás.
No permitamos que nuestro corazón se llene de toda esta mala influencia.

Escrito por: Joel Martinelli

lunes, 28 de abril de 2014

ENVIDIA


 Pero en cuanto a mí, casi perdí el equilibrio; mis pies resbalaron y estuve a punto de caer,
porque envidiaba a los orgullosos cuando los veía prosperar a pesar de su maldad.  Salmos 73:2-3


Las personas siempre fuimos de mirar y observar a los de alrededor, no tanto para interesarnos en ellos, sino para "admirar su prosperidad".
Muchas veces nos preguntamos¿ Cómo hizo para obtener esto o aquello? y este solo hecho hace que desee más la cosa. Eso se llama Envidia.
La envidia traé aparejado varias cosas, entre ellas: Engaño; ¿a qué me refiero? A que podemos llegar a creer una mentira custionarnos algunas cosas que deberían ser muy claras.

"¿Y qué sabe Dios? —preguntan —. ¿Acaso el Altísimo sabe lo que está pasando?
Miren a esos perversos: disfrutan de una vida fácil mientras sus riquezas se multiplican.
¿Conservé puro mi corazón en vano? ¿Me mantuve en inocencia sin ninguna razón?
 En todo el día no consigo más que problemas; cada mañana me trae dolor.
 Si yo realmente hubiera hablado a otros de esta manera, habría sido un traidor a tu pueblo.
Traté de entender por qué los malvados prosperan, ¡pero qué tarea tan difícil!
Salmos 73: 11-16 (NTV)

¿Suena como sí tuviera razón y fuera verdad, no?
Pero no es así, no en vano buscamos y preservamos nuestra santidad.
Es muy frecuente que tengamos esta clase de pensamiento y creamos la mentira de que los demás "prosperan" haciendo maldad y no les pasa nada. Pero el salmista explica que fue el Encuentro con Dios, el encuentro con la Verdad, donde comprendio la realidad de las cosas.

"Entonces entré en tu santuario, oh Dios, y por fin entendí el destino de los perversos."
Salmos 73:17 (NTV)

Cuando nos acercamos a Dios con un corazón dispuesto a aprender, entendemos mejor las cosas, y el "sufrimiento" se convierte en Esperanza. "Conoceran la verdad y la verdad los hará libres. (Jn 8:32) "
Cuando la verdad se hace dueña de nuestra mente, nos damos cuenta de lo grande que es nuestro Dios y nos sentimos unos tontos, porque su conocimiento nos supera.

"Fui tan necio e ignorante, debo haberte parecido un animal sin entendimiento."
Salmos 73:22 (NTV)

Acepta hoy la verdad de que lo mejor que nos puede pasar es tener a Dios por Padre, y repetí junto con el salmista:

"En cuanto a mí, ¡qué bueno es estar cerca de Dios! Hice al Soberano SEÑOR mi refugio, y a todos les contaré las maravillas que haces." (v28) (NTV)