viernes, 30 de mayo de 2014

Joven.. Para nada.

"Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza." 1 Timoteo 4:12


Grandes palabras nos dice Pablo en este versículo. Muchas veces, las personas toman nuestra juventud por poca cosa, o por nada. Creen que nuestro tiempo o nuestro servicio no tiene valor alguno. Que todo lo que hacemos para Dios, no tiene ningún sentido más que el mostrarnos en la iglesia.

Varias veces me enfrente a situaciones en las cuales, algunos líderes o personas mayores que hace mucho asisten a la iglesia se oponen a que un adolescente o joven sirva en las reuniones o en los grupos de preadolescentes o de adolescentes. La razón es porque “los adolescentes o jóvenes no están en condiciones de servir al Señor”. Que gran mentira lo que estas personas creían y estaban firmes. En la Biblia como acabamos de leer, el compañero fiel de Pablo, Timoteo, apenas estaba en la juventud, cuando empezó a servirle a Dios. Y Dios hizo grandes cosas con su vida y por su intermedio. Qué bueno y que distinto es todo si empezamos con creerle a Dios y seguir su llamado. ¿Quién más que Él para capacitarnos de corazón y dejarnos en excelentes condiciones para ayudar a expandir la obra de Dios?

Muchas de estas situaciones son lo que nos hacen decaer y empezar a creer en otras mentiras, las cuales nos alejan cada día un poquito más de Dios. Y estas son las que se aferran a nuestra vida y comienzan a arraigarse en nuestro corazón.

Pero no te preocupes como dicen en este versículo "Alégrate, joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios." Eclesiastés 11:9

Sólo Dios puede juzgarnos y además sólo Él conoce las intenciones en nuestro corazón. Sólo Él te llama a servir y sólo para Él es la gloria, la honra y la alabanza que le damos por medio de nuestro servicio. Si estás en algún ministerio, no estás por casualidad y no importa que tan joven seas, si Dios te puso ahí no dudes que por algo es, y no te olvides de como dice Pablo, de demostrarle a otros creyentes que tu fe, tu palabra, tu testimonio, tu amor y tu pureza siguen intactos.

Dios te bendice

miércoles, 28 de mayo de 2014

Sueños



Pasaje clave: “Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá las peticiones de tu corazón.” Sal. 37:4

Si vamos a Mateo 9:18-38, Podremos ver algunos sueños! Pensemos en algunos!Un hombre sueña con volver a ver viva a su hija…
Una mujer sueña con tener su cuerpo sano…
Dos ciegos sueñan con recuperar la vista…
Un mudo endemoniado sueña con ser libre y recuperar el habla…
Y Jesús, que sueña con muchos obreros ocupados en la obra de Dios…
Cinco sueños.
Las personas pesimistas y negativas les deben haber presentado una larga lista de razones por las cuales ellos nunca podrían alcanzar sus sueños. Por ejemplo: “La muerte es el final”. “Perdiste a tu hija y nunca la recuperarás”. “Los médicos no pueden curar tu enfermedad”. “La ceguera es incurable”. “Ustedes ya están grandes para cambiar”. “No conocemos a nadie que haya vuelto a ver”. “El ver no es para ustedes”. “Los especialistas han dicho que su problema es irreversible”. “Si están endemoniadamente locos y mudos lo mejor será encerrarlos en un psiquiátrico”. “Si no tienes plata no lograrás nada”. “Sean realistas. Los poderosos logran cosas, ¿quién se va a fijar en ustedes?”. “Con esa cara nunca conseguirás una novia”.  “¿Tú, ingeniero? Si eres horrible estudiando”. “Esa profesión no tiene futuro, perderás tu tiempo”. “Deja de perder tiempo en la iglesia. Eso es para ignorantes”.
¿Qué hicieron estas personas? ¿Se dieron por vencidas? ¿Escucharon las opiniones de las personas y abandonaron sus sueños? ¿Se deprimieron y se enojaron con todo el mundo? ¡NO!
Ellos fueron tras su sueño. Ellos creyeron que podían lograrlo. Ellos lo intentaron y buscaron a Jesús. Ellos dijeron: “sí, podemos obtener lo que anhelamos”.
1. Necesitas Tener Un Sueño.
Tener un sueño te mantendrá vivo y motivado. Te mantendrá activo y lleno de energías. ¿Qué quieres ser cuando “seas grande”? ¿Qué quieres lograr? Si puedes responder éstas preguntas, entonces tienes un sueño.
2. Cree Que Puedes Lograrlo.
La pregunta que tienes que hacerte a ti mismo es esta: “¿Por qué creo que SI puedo lograrlo?
Hasta ahora has sentido, pensado y escuchado que “no puedes”, que “es imposible”, que “no es para ti”, que “eres muy chico”, que “no tienes la capacidad”, que “se necesita mucho dinero”, etc. Pero, en vez de pensar en todo eso, ¿por qué no te pones a pensar y a escribir, ahora mismo, por qué piensas que sí puedes lograr tú sueño? No estoy diciendo que sea fácil, estoy diciendo que es posible. Lograr tú sueño es posible.
3. Muévete Para Alcanzarlo.
Los cinco protagonistas que menciono hicieron algo. Se movieron. Fueron tras su sueño. No se tiraron a la cama a llorar, ni perdieron el tiempo buscando culpables. Se movieron. El sueño no vendrá a ti. Tienes que trabajar duro para alcanzarlo. Tienes que estar dispuestos a sacrificarte. Por ejemplo: “Tengo el sueño de ser un Agrimensor pero no quiero estudiar 5 años, es mucho tiempo. Pero cómo me gustaría serlo”. ¡Con esa actitud nunca seré un Ing. Agrimensor! Para que las cosas sucedan tienes que tomar la decisión para que sucedan. Créele al Señor y esfuérzate por tu sueño.
4. Rodéate de Personas Positivas.
Si estás con gente negativa no sólo verás todo mal, sino que nunca lograrás tus propios sueños. ¿Cómo son las personas con las que pasas la mayor parte de tu tiempo? ¿Positivos o negativos? Rodéate de gente que te anime, que te levante, que te quiera, que te exija y que te edifique. Positivos
Jesús, sueña con muchos obreros ocupados en la obra de Dios, que ese sea  nuestro primordial sueño!
J
Dios los Bendiga! :D

viernes, 23 de mayo de 2014

Por nuestros frutos...

Mateo 7: 15-20

"15 Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.
16 Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?
17 Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.
18 No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos.
19 Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego.
20 Así que, por sus frutos los conoceréis"

Ante esta porción, mucho no puedo añadir...
Claro está que se trata del testimonio de un cristiano.

Conocemos los frutos del Espiritu según Gálatas 5:22, ellos son:
  • amor
  • gozo
  • paz
  • paciencia
  • benignidad
  • bondad
  • fe
  • mansedumbre
  • templanza
Estas son características que como cristianos deben representarnos, pero dicho está: Son frutos del Espíritu. Es decir, cuando más dejemos actuar al Espíritu Santo en nosotros y menos a nuestra carne, es cuando florecerán estas virtudes en nosotros. Claro que también tenemos que esforzarnos por lograr ser árbol de buenos frutos. Pero... ¿Cómo? ¿Cómo 'dejamos actúar al Espíritu Santo'? 
Primero, y antes que nada debemos TENER INTIMIDAD CON DIOS, dedicar tiempo a conocerlo, LEER SU PALABRA y dejarnos guíar por ella, para eso debemos ESTUDIARLA, y PONER EN PRÁCTICA en nuestra vida diaria, y sin ORACIÓN, sin pedir a Dios su guía y ayuda, no podremos solos por nuestros medios, es por eso que la oración, el comunicarnos con Nuestro Padre es indispensable.
Te animo a que puedan encontrar estos frutos en vos, y puedas ser un INSTRUMENTO de Dios, con sólo ser EJEMPLO y predicar CON TU VIDA.


Bendiciones! 

lunes, 19 de mayo de 2014

Entendamos el por qué

Recuerda cómo el SEÑOR tu Dios te guió por el desierto durante cuarenta años, donde te humilló y te puso a prueba para revelar tu carácter y averiguar si en verdad obedecerías sus mandatos. Sí, te humilló permitiendo que pasaras hambre y luego alimentándote con maná, un alimento que ni tú ni tus antepasados conocían hasta ese momento. Lo hizo para enseñarte que la gente no vive sólo de pan, sino que vivimos de cada palabra que sale de la boca del SEÑOR.
Todo esto lo hizo para que nunca se te ocurriera pensar: “He conseguido toda esta riqueza con mis propias fuerzas y energías”. Deuteronomio 8:2-3,17 (NTV)

A la verdad siempre que tenemos dificultades le preguntamos a Dios ¿por qué?, incluso a veces hasta con insolencia, porque no comprendemos sus planes ni sus propósitos.
La comodidad en la que nos manejamos regularmente nos hace pensar que TODO esta bien y en orden. Pero es el todo poderoso quien conoce nuestro corazón y sabe lo que necesitamos, entiende mejor que nosotros, que necesitamos aprender y mejorar todos los días.

En el desierto se prueban los corazones, se pulen las decisiones y se fortalece la relación con el Santo.

Nuestra dependencia siempre flaquea, nuestro ego siempre florece, mantener un equilibrio nunca fue fácil.
Es por eso que Dios nos lleva al desierto, por una sola razón: Nuestra obediencia y nuestro deseo de Él nunca pueden ser mediocres, siempre hay alguna que otra mosca volando a nuestro alrededor que nos pega alguna basurita. No solo hay que limpiar la basurita, hay que detectar a la mosca y matarla.

Aveces nos olvidamos de lo fundamental y por eso padecemos más en el desierto; el texto comienza diciendo:"el Señor tú Dios te guió". No debemos perder de vista al guía, no debemos pensar que nosotros podemos, que nuestra experiencia es suficiente, necesitamos tomarnos de la mano del que conoce el desierto y así poder atravesarlo con confianza, puede que sintamos miedo, pero si recordamos quién nos guía, nuestros pasos serán firmes y sin titubiar.

En este día aprendamos que no solo de pan vive el hombre, no solo de lo que sabe hacer bien o de lo que disfruta a diario; sino de lo que sale de la boca de Dios.

sábado, 17 de mayo de 2014

¿Qué es lo importante?

“Quiero que demuestren amor,
no que ofrezcan sacrificios.
Más que ofrendas quemadas,
quiero que me conozcan.”
Oseas 6:6

Antes que nada, quiero confesar, mi profundo encanto hacia este versículo. No creo que pueda leer, tan claramente, lo que Dios quiere de nosotros, como lo redacta el profeta Oseas en este pasaje.
Muchas veces, como cristianos, estamos muy ocupados, pensando que es lo más importante, en la vida de un creyente. Y a partir de esto sacamos posibles hipótesis de lo que ocupa el ranking de las cosas infaltables, en la vida cristiana. Déjame mostrarte ejemplos que pensé, de lo que la mayoría de los cristianos piensan que es lo primordial:

1: Congregarnos todos los domingos, todas las reuniones de oración y a todos los encuentros posibles. Quiero decirte, que esto no es lo más importante, no es lo primordial. Si es de mucha bendición para nuestras vidas, pero a Dios no le interesa saber cuántas sillas están ocupadas en el templo, a Él le interesa que su Iglesia siga confiando y creyendo. Sin ir más lejos, hay infinidad de casos de personas que van a las reuniones a ocupar una silla, a mostrarse, a aparentar estar conmocionado por el mensaje, siendo que en su corazón, nada pasa, y está todo seco.

2: Ofrendar todos los domingos una cantidad alta de dinero, sin importar que en la semana tenga que pagar mis deudas. Otra cosa que muchos cristianos creen que es lo más importante que deben hacer. Encontramos en la Biblia, pasajes que hablan de la ofrenda, y es algo muy beneficioso hacerlo, pero no vamos a dejar de pagar nuestras cuentas o deudas por ofrendar más de lo que podemos. Esto Dios no lo prefiere. Debemos ofrendar con el corazón lo que cada uno pueda. Tiempo, servicio, dinero, o donaciones.

3: Hacer un estudio bíblico profundo, sin poder aplicarlo a nuestra vida. Todos sabemos de la importancia de leer la Biblia, todos los días. De encontrar más cualidades de Dios y de aprender lo que Él quiere. Pero no es lo primordial, es importante, si, pero no tiene que ser lo único. Muchas veces personas que asisten a diferentes iglesias, piensan que sabiendo todas las escrituras, son mejores, o agradan más a Dios, y a veces en situaciones, hasta se olvidan del amor que el mismo Dios predica. Tener un vasto y amplio conocimiento de las Escrituras no lo es todo.


Son sólo unos ejemplos, que podes ver o no más frecuentemente. No por esto, hay que dejar de congregarse, de ofrendar y de leer la Biblia, pero sí, no enfocarse ni encerrarse en estas cosas, y digo estas, pero hay muchísimas más. Como podemos leer en Oseas, Dios prefiere que lo alabes, no con ofrendas, si no con muestras de amor, no con sacrificios en vano, si no, conociéndolo aún más. Dios no busca que ofrendes una cantidad de dinero, Dios espera que lo busques todos los días, que ayudes a otras personas que lo necesitan. Dios no se va a enojar si no pudiste ir a un encuentro de oración. Dios no te va a juzgar si no te sabes cincuenta versículos de memoria. Él sólo quiere ser tu amigo, que le demuestres el amor que le tienes a Él y a tu prójimo y que tengas una hermosa relación, en donde diariamente, lo conozcas más, lo alabes y sea el centro de tu vida.

jueves, 15 de mayo de 2014

Los 7 descensos de Cristo


Cuando hablamos de descensos de Cristo nos referimos a la cantidad de veces que Jesucristo tuvo que rebajar su persona para poder ser el cordero sin mancha que salvase a la humanidad.
El pasaje de Filipenses 2:7-8 nos dice:

1) Sino que se despojó a sí mismo.
Osea no quiso ser divino sino que se vació de todo esplendor, no quería nada que le recordase que podía hacer mas fácil su tarea, sino que quiso hacerlo sin atajos, simplemente derramar su espíritu.

2) Tomando forma de siervo.
Dice la escritura que vino a servir, el sanaba y lavaba los pies de sus discípulos enseñando siempre que, los que sirven son los primeros en el reino de los cielos aunque se piense en este mundo que los servidos son los mas grandes. Y era una locura porque él era el rey de reyes, señor de señores.

3) Hecho semejante a los hombres.
Además fue uno de nosotros, como vos y yo exceptuando la naturaleza pecaminosa, no existe comparación entre la divinidad y los hombres, suficiente degradación ya tenia Cristo siendo hombre.

4) Y estando en la condición de hombre.

Jesucristo padeció siendo hombre, hasta el mismo satanás fue a tentarlo. Recibió rechazo de su propio pueblo, sufrió por la incredulidad de muchos, quisieron matarlo, lo negaron, lo escupieron. Cosas que siendo rebajado a hombre y ensima recibirlas era mucho peor.

5) Se humilló a sí mismo.
Como si fuera poco él mismo se humillo, porque fue y delante de Dios dijo: yo voy a pagar por los pecados de aquellos que me ignoran, por esos que me escupen y por aquellos que todavía no te conocen, Yo siendo puro y sin mancha me ofrezco a pagar la deuda. Yo JUSTO MUERO POR LOS INJUSTOS.

6) Haciéndose obediente hasta la muerte.
Una vez ya hecho hombre y humillado no miro atrás, el amor que tenia por nosotros era su fuerza para seguir, y aunque mucho le decían que se baje de la cruz el fielmente estaba allí.
"Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca." Isaías 53:7

7) Y muerte de cruz.

El Dios hecho hombre murió por vos y por mi aunque no lo merezcamos. Y cuando estaba por cumplirse: Juan 19:30 Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.

La muerte no le arrebato su espiritu sino que el lo entrego para luego de tres dias volverlo a tomar.
No te pierdas los 7 ascensos de Cristo Parte II.

Dios te bendiga ricamente!

lunes, 12 de mayo de 2014

¿Mensaje verdadero o sólo palabrero?




¿Conocés la historia de la liberación del pueblo de Israel? Sin duda ésta es una de las más contadas. Pero hay ciertos personajes que suelen ser pasados por alto, y hoy me quiero detener en ellos.

Luego de que  Moises sacó a los israelitas de la esclavitud de Egipto, Dios le dijo lo siguiente:


«Envía algunos hombres a Canaán para que exploren el territorio que les voy a dar. Que vaya un jefe de cada tribu».

Números 13: 1-2 (TLA)


Doce espías tenían que ir a buscar información sobre cómo era la tierra que Dios les había prometido, tenían que averiguar cómo era la gente que allí vivía, si era poca o mucha, fuerte o débil y si había tierra era fértil o no. 
  
Y ésto fue lo que encontraron:


"Los espías vieron que en Hebrón vivían Ahimán, Sesai y Talmai, que eran descendientes del gigante Anac. Cuando llegaron a un arroyo, cortaron un racimo de uvas tan grande y pesado que tuvieron que cargarlo entre dos. Los otros llevaron granadas e higos..."


Números 13:22-24 (TLA)


A pesar de las descripciones que nos da la Biblia sobre éste paraíso, parte del grupo de espías decidieron no traer buenas nuevas al resto del pueblo que esperaba con ansias la información.

Dijeron que el territorio era malo, que allí no se podía vivir y que definitivamente no iban a poder vencer a gente tan poderosa. Hasta incluso se pusieron novelescos y llegaron a decir: "Es tan malo que la gente se muere como si se los tragara la tierra."


Pero hubieron dos espías que tuvieron una actitud diferente, que trajeron un mensaje de esperanza. Ellos fueron Josué y Caleb. Y dijeron: 


"- ¡Vamos a conquistar ese territorio! ¡Podemos hacerlo!... 
El territorio que vimos es bastante bueno; allí siempre habrá abundancia de alimentos. Dios nos ama; nos ayudará a entrar en él y nos lo dará. Lo importante es que no se rebelen contra Dios ni tengan miedo de la gente que vive en ese territorio. Será muy fácil vencerlos, porque ellos no tienen quién los cuide. Nosotros, en cambio, contamos con la ayuda de nuestro Dios. ¡No tengan miedo!»"

Números 13:30 y 14:7-9 (TLA)


¿Habrá alguna diferencia entre las versiones de estos grupos de espías? 

La verdad es que muchas veces nos parecemos a los que trajeron desilusión, desgano y falta de fe.

Nuestra misión en este mundo es traer a las personas el mensaje del evangelio, pero si mi manera de transmitirlo no es como la de Josué y Caleb, el impacto que tenga en las personas no va a ser el deseado por Dios.

No sólo podemos transmitir el mensaje del evangelio por medio de nuestras palabras, sino también, por medio de nuestras acciones y actitudes. 

Ningún amigo, compañero o familiar va a creerme que Dios tiene el poder para transformar vidas, si la mía no muestra más que las características mencionadas anteriormente.


Lo que decimos a otras personas y el modo en qué actuamos con ellas, influye en cómo van a recibir nuestro mensaje.

¿De qué manera influimos en la vida de los demás? 





martes, 6 de mayo de 2014

Yo Predicar?! Naaaahhhh!

Pasaje clave: Lucas 10:1-24.
 "Y les DIJO: Id Por Todo El Mundo y predicad el Evangelio a toda criatura". Marcos. 16:15                                

Lucas dedica este capítulo casi exclusivamente a la predicación del evangelio. O cómo hablarles de Jesús a tu familia y compañeros sin morir en el intento.
El Señor nos manda a hablar de su palabra y a mostrar su paz, pero ¿cómo lo hacemos? :P

Te comparto algunas ideas ¡bien copadas!:

1º. Muéstrales lo positivo que Dios está haciendo contigo.
Tus conductas y reacciones hablan más fuerte que tus palabras. Ellos no quieren escuchar un discurso, una predica, ellos esperan ver algo distinto en tu vida. Tu testimonio es la clave en tu casa y con tus amigos. Nada es más perjudicial que decir una cosa y hacer otra, por eso tienes que hacer la diferencia en donde te encuentres y dejar que tu vida refleje el amor de Dios.

2º. Ten bien en claro tu identidad en Cristo.
No seas un camaleón que cambia según el medio ambiente. Eres un hijo de Dios en todo momento y en todo lugar. Vive como Dios quiere que vivas y habla lo que Dios quiere que hables. La gente está cansada de los falsos y mentirosos. Sé un auténtico hijo de Dios y te escucharán.

3º. Sé sabio.
El Espíritu Santo convence de pecado, no nosotros. No presiones a nadie. El que no quiere no quiere. Evita las discusiones y peleas sobre la fe y la iglesia, porque sólo sirven para alejar a las personas de Dios. Solamente habla del amor y del perdón de Dios y muéstrales cómo ha cambiado realmente tu vida.

4º. Agrada a Dios y no a las personas.
Jesús nos envía como corderos en medio de lobos. ¿Quiénes son los “lobos”? Los que se burlan, los que se te ríen en la cara, los que te rechazan porque eres cristiano, los que te “gastan” porque no vives como ellos y vas a la iglesia, etc. Pero tranquilo, no nos rechazan a nosotros, rechazan a Jesús (vs.16).

No dudes, ni tengas miedo de lo que dicen. No estás solo. Jesucristo mismo está a tu lado para ayudarte. No niegues a Jesús para quedar bien con la gente. Tienes que quedar bien con Dios y todo lo que hagas te saldrá bien.




viernes, 2 de mayo de 2014

Sabios hijos de Dios




Hoy quiero hablarles sobre un versículo muy conocido.
Tal vez nunca le has prestado atención o nunca entendiste qué nos quiere decir esta hermosa porción de la palabra de Nuestro Padre...
Proverbios 1:7 a mi entender, describe la definición de sabiduría más acertada y concisa:
  "El principio de la sabiduría es el temor de Jehová;
Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza."

 Estudiemos la palabra TEMOR, definitivamente no se refiere al temor de miedo, sino de RESPETO.
Temer a Dios significa estar conscientes en todo momento de que Él está con nosotros, de que sabe cada pensamiento que pasa por nuestra cabeza, ve y oye lo que hacemos y decimos. Tenemos un Dios omnisciente, y tenemos que tener eso en cuenta en cada paso que damos, y buscar AGRADARLE... esto es temer a Dios y para Él, esto es acercarnos a la sabiduría, no creamos que la sabiduría se alcanza en la ancianidad, puede que una persona con bastantes años haya sido insensato, y como dice esta porción de proverbios, a lo largo de su vida DESPRECIÓ la sabiduría y enseñanza, tal vez fue un necio y lejos está de ser sabio. 

 Lo más probable es que nunca lleguemos a ser verdaderos sabios, nunca vamos a sabérnoslas todas, pero si tememos a Dios: si cada decisión que tomamos la consultamos a nuestro Padre, si estamos conscientes de Su presencia a cada momento y es nuestro deseo agradarle, aunque nos cueste, vamos a actuar como Él quiere. Tenemos un Dios sabio, y temerle, sin dudas, es acercarnos a Su sabiduría, lo que implica tener una vida agradable ante los ojos de Nuestro Padre celestial. Es fácil de comprender, pero no de llevar a cabo ¿Cierto? 
Te desafío a buscar la sabiduría de Dios y caminar como Él quiere:
Te desafío a temer a Dios, sé consciente Su presencia y busca agradarle.


  Dios te bendiga!