miércoles, 30 de septiembre de 2015

Contraindicaciones del S 119 PDD


Llegamos al final de este tremendo salmo y no hemos dejado de ver cada día los beneficios que la palabra de Dios trae a nuestra vida cuando la leemos y aplicamos (suministramos), es como “…medicina para los huesos"  Prov.16:24. Sin embargo, como con toda medicina, al final de su prospecto médico esperaríamos encontrar las contraindicaciones de la misma. Pacientes a los cuales no aplicarlas, advertencias y precauciones a tener en cuenta, interacciones con otros medicamentos, reacciones adversas y causas negativas por sobredosificación.
Sin embargo…
Llegamos al final de nuestro prospecto del S119 PDD (Salmo 119, Palabra de Dios) y en lugar de las contraindicaciones comunes y silvestres nos encontramos con más y más beneficios para quien la consuma. Te invito a no despegarte de tu silla y que juntos terminemos de conocer los efectos que produce en nosotros la biblia.
  • ·         Produce entendimiento: ¿Qué es lo que me permite entender? Me permite entender cuál es la voluntad de Dios y como yo quepo en ella, eso hacen sus palabras. (Sal. 119:169)
  • ·         Confirma su promesa: El cumplimiento de esa voluntad revelada es la promesa que podemos esperar y reclamar. (Sal. 119:170)
  • ·         Produce alabanza en mis labios: Al ver como Dios se ocupa de que estemos bajo la cobertura del reino y no nos salgamos de ella, esto lo logra al enseñarnos las normas de su reino: “estatutos”. (Sal. 119:171-172)
  • ·         Produce seguridad: Su mano nos protege cuando decidimos por sus principios (Sal. 119:173).  “Nadie nos puede sacar de su mano” Jn. 10:28.
  • ·         Produce deseos de estar con Dios: Cuando vivimos de acuerdo a la revelación de Dios para nuestra vida (Sal. 119:174). “Acérquense a Dios, y él se acercará a ustedes." Stg. 4:8
  • ·         Nos humilla: Para que entendamos cuál es nuestra condición (Sal. 119:176). Si bien esto aparece en último lugar, es lo primero que la palabra de Dios produce en mí. Es el objetivo primario de ella. Hacernos humildes al entender nuestra condición de pecador porque de esa manera, solo así es que recibimos y alcanzamos la gracia de Dios (Stg. 4:6) necesaria y suficiente para ser salvos.


Hay una frase que dice DEMASIADO BUENO COMO PARA SER CIERTO. Quizás por esto muchos han hecho a un lado la biblia de sus vidas, otros quizás no tan drásticos y de vez en cuando le echan una miradita (a ver si Dios tiene algo para mí). La verdad es que si decís creer en ella entonces no basta con una miradita cada tanto y menos que seas totalmente indiferente. Si pretendes que un medicamento te haga efecto y te sane de una enfermedad, no puedes tomarlo cada cuando tengas ganas ni menos tenerlo guardado en el botiquín y sin abrir. Nunca te va a afectar, lo mismo sucede con la biblia, NO puedes ser indiferente a ella y NO puedes leerla cuando tengas ganas. TENÉS que CONOCER lo que dice para que puedas saber qué APLICAR.


“Estudia constantemente este libro de instrucción. Medita en él de día y de noche para asegurarte de obedecer todo lo que allí está escrito. Solamente entonces prosperarás y te irá bien en todo lo que hagas. Josué 1:8”

Escrito por: Alexis Barolin

martes, 29 de septiembre de 2015

Nuestra Roca Firme



En estos versículos vemos que el salmista tenía más respeto y temor por la Palabra de Dios que por los gobernantes de este mundo. 

En momentos de dificultad ¿Temes de lo que los hombres pueden hacerte o confías plenamente en Dios?

"Príncipes me han perseguido sin causa,
Pero mi corazón tuvo temor de tus palabras.
Me regocijo en tu palabra
Como el que halla muchos despojos."
 Salmo 119:161-162

Muchas veces los cristianos sufrimos persecución, burlas, rechazo; o somos juzgados injustamente pero este salmo nos invita a mantenernos firmes en la palabra de Dios.

"Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores
por medio de aquel que nos amó."
 Romanos 8:37

Siempre hay alguien que quiere desanimarnos ; Ese es nuestro gran enemigo, el diablo; Porque el sabe que somos luz y la luz sirve para desmentir al pecado. Tenemos que  estar firmen en la palabra de Dios porque  somos los primeros tentados a caer.

"La mentira aborrezco y abomino;
Tu ley amo"
Salmo 119:163

Podemos observar también la importancia que le deba el salmista a la alabanza de la palabra; este es un hermoso ejemplo que deberíamos tomar los cristianos. Creemos el habito de alabar la palabra de Dios, apoyémonos en ella y confiemos.

"Siete veces al día te alabo
A causa de tus justos juicios.
Mucha paz tienen los que aman tu ley,
Y no hay para ellos tropiezo."
Salmo 119: 164-165

Como fruto de nuestro amor y obediencia a la palabra, Dios nos promete paz y guía, El es nuestra roca firme, en El estamos libres de tropiezo.

"La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da.
No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo."
Juan 14:27


¡No hay gigante más grande que Dios!

lunes, 28 de septiembre de 2015

Siempre te escucha


Mira mi sufrimiento y ven a salvarme
porque nunca me he olvidado de tus enseñanzas.
Defiende mi causa y sálvame;
dame vida como lo prometiste.
(Salmos 119:153-154)

Que preciado es poder estar seguros de que Dios está atento a nuestro clamor (Jeremías 33:3). Que nos escucha, que viene a nuestro favor porque somos sus hijos y guardamos (practicamos) sus enseñanzas.
¡Sus promesas son verdaderas!
Su fidelidad, su amor, su justicia, nos rodean constantemente. Las personas que buscan dañarnos no pueden estar más cerca de lo cerca que Dios está de sus hijos.

La salvación está muy lejos de los perversos
porque no obedecen tus mandatos.
SEÑOR, tu compasión es muy grande;
conforme a tu justicia déjame vivir.
Tengo muchos enemigos y gente que me persigue,
pero nunca dejaré de cumplir con tus requisitos.
Detesto ver a esos traidores
porque no siguen tu palabra.
(Salmos 119:155-158)

Todas las promesas de Dios son verdaderas. Pero todas exigen algo a cambio:
Obediencia y permanencia. Nunca te va a fallar. Las palabras de su boca irradian justicia.
Mira SEÑOR, yo obedezco todas tus instrucciones;
conforme a tu fiel amor, dame vida.
La suma de tu palabra es verdad;
cada una de tus justas órdenes permanecerá para siempre.
(Salmos 119:159-160)

Confía en la verdad, la única verdad (Juan 14:6). Nadie puede quebrantarla (Mateo 24:35). 
Te vas a sorprender de su inconmovible amor y fidelidad.

sábado, 26 de septiembre de 2015

Un Clamor intenso. Un Dios Cercano



Oro con todo el corazón; ¡respóndeme, Señor!
    Obedeceré tus decretos.
146 
A ti clamo; rescátame
    para que pueda obedecer tus leyes.
147 
Me levanto temprano, antes de que salga el sol;
    clamo en busca de ayuda y pongo mi esperanza en tus palabras. Salmo 119:145-147 (NTV)
Es importante entender que en este contexto, en esta época, era posible escuchar la voz audible de Dios para todos aquellos que eran muy apegados a Él.
Es por eso que el salmista al reconocer una situación de su vida no tan sencilla y agradable, extiende un genuino y delicado clamor. Un clamor intenso,entrañable, vigoroso, que no sabe de horarios ni calendarios, porque así como cualquier persona busca desesperada un refugio durante una lluvia con granizos, así el autor de este salmo deseaba encontrarse con la voz de Dios.

Me quedo despierto durante toda la noche,
    pensando en tu promesa.
149 
Oh Señor, en tu fiel amor oye mi clamor,
    que el seguir tus ordenanzas me reanime.
150 
Los que no respetan la ley vienen a atacarme;
    viven alejados de tus enseñanzas. Salmo 119:148-150 (NTV)
Se dedica ahora el escritor de estos versículos a describir y recordar porque busca y clama por la voz de Dios. Es que hay una inamovible confianza en el Dios creador de los cielos y la tierra. 
Sabe muy bien que el Señor no falla a sus promesas, que al escucharlo su corazón volverá a latir con pulso normal, cobrará fuerzas y su ánimo será quien lo demuestre.
Es que en nuestras oraciones dejamos nuestras cargas, luchas y pesares en las manos de Dios; y cuando con amabilidad y gentileza nos responde, podemos sentir su abrazo, su caricia y esa palmada que desencadena una confianza que recorre todo nuestro ser aliviándolo.

Pero tú estás cerca, oh Señor,
    y todos tus mandatos son ciertos.
152 
Desde los primeros días
    sé que tus leyes durarán para siempre. Salmo 119:151-152 (NTV)
Verdaderamente no hay lugar a dudas. Nuestro Dios es cercano a nosotros.
Jamás falla. Nunca olvida sus promesas, ni hace oído sordo a nuestras suplicas.

¿Entendimos que su Palabra es para siempre? ¿confiamos en él?

viernes, 25 de septiembre de 2015

Vivir con rectitud


Tsade
 Esta porción nos da otra clara redescripción de los consejos, palabras y mandatos de Dios:

"Justo eres tú, oh Jehová,
    Y rectos tus juicios.
Tus testimonios, que has recomendado,
Son rectos y muy fieles


Tal como estos primeros versículos nos ndenotan, sus consejos y JUICIOS son RECTOS. Esta es la justicia que debe gobernar nuestra vida, no aquellos juicios propios y carnales, lo que pensamos que "esta bien" bajo nuestros fundamentos. Sólo Dios puede darnos un JUSTO consejo, a través de Su palabra.

Mi celo me ha consumido,
Porque mis enemigos se olvidaron de tus palabras.
Sumamente pura es tu palabra,
Y la ama tu siervo.

También vemos en estos versículos otra cualidad, que de hecho, nada ni nadie posee en totalidad: PUREZA. Solo es "sumamente pura" la palabra de Dios. 

Pequeño soy yo, y desechado,
Mas no me he olvidado de tus mandamientos.
Tu justicia es justicia eterna,
Y tu ley la verdad.

Eterna, nada somos hoy, no podemos guiarnos por lo que hoy vivimos, ya que es incomparable lo que viviremos en la eternidad, y como seres eternos, debemos basar nuestra vida NO en una justicia humana, finita e <injusta> sino aquella que es pura, recta y verdadera. 

Aflicción y angustia se han apoderado de mí,
Mas tus mandamientos fueron mi delicia.


Reflejando una virtud del mismo Dios: CONSUELO. Para quienes nos deleitamos en ella, incluso en angustia y afliccion seran sus mandamientos que nos ayuden a recobrar las fuerzas, nuestra delicia, los cuales son para nuestro beneficio y restauración.

¿Ahora que hacemos nosotros ante todas estas virtudes? Rescato dos expresiones del salmista: "Y la ama tu siervo"
Amar la palabra, su ley, sus mandamientos. ¿Como nuestra vida seria guiada por algo por lo que no sentimos amor? Y ¿Como nuestra vida mostrará rectitud sino vivimos conforme a lo que es VERDADERAMENTE RECTO PARA SIEMPRE?
De esto se trata vivir con rectitud, no sólo ser oidores de la palabra,  sino vivir por ella.
Pero no nos olvidemos de lo más importante: 
Justicia eterna son tus testimonios;
Dame entendimiento, y viviré."
Salmos 119:137-144

Ese entendimiento que sólo Dios puede darnos, escuchar su voz hablándonos sólo ocurre cuando le pedimos oirle, mediante la oración...

Vivimos conforme NO a lo que decimos, sino a lo que pensamos. Que nuestros pensamientos sean conformes a la justicia de Dios, que nuestra mente se llene de Sus consejos, lo unico verdaderamente PURO, VERDADERO, ETERNO, AMABLE y DIGNO de ALABANZA:

"Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad."  Filipenses 4:8

Por lo demás <tu nombre> pensar en todo lo que proviene de La Palabra de Dios.

Que nuestra vida refleje rectitud. Amén. 


miércoles, 23 de septiembre de 2015

Tu palabra alumbra!




Cuando nos llenamos de la Palabra de Dios nuestro corazón es movido a obedecer y a honrar a Dios. Es mi oración que esto sea una realidad en nuestras vidas.

Los versículos de hoy:
“Maravillosos son tus testimonios, por lo que los guarda mi alma. La exposición de tus palabras imparte luz; da entendimiento a los sencillos. Abrí mi boca y suspiré, porque anhelaba tus mandamientos. Vuélvete a mí y tenme piedad, como acostumbras con los que aman tu nombre. Afirma mis pasos en tu palabra, y que ninguna iniquidad me domine. Rescátame de la opresión del hombre, para que yo guarde tus preceptos. Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo, y enséñame tus estatutos. Ríos de lágrimas vierten mis ojos, porque ellos no guardan tu ley”.
 Salmo 119:129-136
El salmista inicia estos ocho versículos declarando que su alma guarda los testimonios de Dios porque estos son maravillosos, esto puede parecer una simple oración, pero en realidad aquí podemos ver un nivel de asombro y admiración que muchos de nosotr0s podemos haber perdido. 
El salmista cuando se acerca a la Palabra no se acerca a un libro cualquiera sino a la mismísima Palabra de Dios, una fuente inagotable de verdad, dirección y vida. Es por ello que el salmista entiende que la respuesta correcta ante Ella es la obediencia. Lee la biblia cada día? Cuándo se acerca a ella, se acerca a un libro o a la Palabra de Dios? La consideras un tesoro valioso?. Se acerca con la actitud correcta, queriendo obedecerla?.
Literalmente nos dice "el portal de tu palabra alumbra.." y es que la palabra que se usa para "exposición" es un vocablo que significa puerta, apertura, portal, puerta.

David nos enseña "en Palestina la mayoría de las casas no tienen ventanas así que entra la luz por el portal (la puerta)"
Spurgeon dijo "¡Oh, si tus palabras, como los rayos del sol, pudieran entrar a través de la ventana de mi entendimiento y disipar la oscuridad de mi alma!".
 Cuando uno se acerca a la Palabra con el deseo de aprender, el Señor le ilumina, le enseña. No hay nadie que no pueda recibir el mensaje de Dios porque aunque no tengas experiencia, seamos nuevos en los caminos, la Palabra te alumbrará. Hacen entender a los simples, a los ingenuos, a los que no tienen experiencia.
 Cómo ha afectado la entrada de la Palabra de Dios a tu vida?, a tu familia?. ¿Cómo afectaría esa entrada a las ciudades, naciones? Oremos por ciudades y naciones que están en terrible oscuridad, donde la Palabra es un bien prohibido, oremos que haya apertura, que se abran las puertas y pueda entrar la luz de vida.

Cuán grande es el amor del salmista por a Palabra, por el alimento espiritual. No sé por qué suspira tu alma, no conozco cuales son tus anhelos, pero el salmista nos lo deja claro, es de la Palabra de Dios de la que tiene sed, de la que tiene hambre. Muchas personas en las iglesias nunca crecen porque no comen de la Palabra, no la aman, no la leen, no la ponen por práctica.

Señor, ilumíname, que tu rostro me ilumine, que tu favor, presencia y poder nos ayude en el día a día, que nos enseñes más y más. Hay muchos que quieren experiencias de Dios, ser tocados, ser llenos, caerse... Hay personas que hacen miles de kilómetros para ir a un concierto pero es incapaz de tomarse cinco minutos para leer la Palabra de Dios o de practicar la oración. No digo que esté mal ir a conciertos, solo te digo que debe haber un equilibrio. Hay un equilibrio en tu vida entre eso y la lectura, el estudio de las Escrituras?.

Finalmente el salmista nos muestra en el último versículo una expresión profundamente gráfica, ha llorado al ver a los que desobedecen la Palabra. Ayer leí una frase en una imagen que me impacto, decía lo siguiente: “Que la Palabra de Dios sea tu pan de cada día y no un pastel para ocasiones especiales” cuantos nos dicen estas palabras? El salmista llora con compasión por aquellos que no guardan la Ley de Dios, él ha experimentado que bueno es Dios y Su Palabra dulce como la miel, y siente una profunda tristeza por los que no le conocen. Ahora bien, vos se te entristece tu corazón por los perdidos?

Pidámosle al Señor que nos dé un corazón como el Suyo!

Dios los bendiga!

#Dios #Biblia #Salmos  #MesdelaBiblia  #PromesasDeDios

Ayin



121 Juicio y justicia he hecho;
    No me abandones a mis opresores.
122 Afianza a tu siervo para bien;
No permitas que los soberbios me opriman.
123 Mis ojos desfallecieron por tu salvación,
Y por la palabra de tu justicia.
124 Haz con tu siervo según tu misericordia,
Y enséñame tus estatutos.
125 Tu siervo soy yo, dame entendimiento
Para conocer tus testimonios.
126 Tiempo es de actuar, oh Jehová,
Porque han invalidado tu ley.
127 Por eso he amado tus mandamientos
Más que el oro, y más que oro muy puro.
128 Por eso estimé rectos todos tus mandamientos sobre todas las cosas,
Y aborrecí todo camino de mentira.



A lo largo de la biblia, nos podemos dar cuenta que en ella no hay problema sin solución, ni dificultad, sin que Dios no tenga una palabra de ánimo y consuelo,  o si nos estamos equivocando, de corrección.  La Biblia es perfecta, nos enseña a vivir y nos proporciona todas las herramientas necesarias para hacerlo. Por eso el salmista la amaba, más que a cualquier cosa, más que al oro puro (V.127). 
¿Saben lo valioso que es el oro puro? Simples alhajas de este metal, mínimamente mezclado con otros metales, valen miles, y hasta millones. Muchas veces nos cuesta amar la Biblia más que a cosas materiales y le damos valor a cosas insignificantes; nos es difícil reconocer el precio incalculable que posee. Pero como el escritor de este salmo, es necesario desfallecer por la Salvación y por la Palabra de Su justicia (V. 123), porque vivimos en un mundo injusto y pecador.

En todo este pasaje, el escritor le pide a Dios tres cosas en general: que le enseñe sus estatutos, que no lo abandone y que le dé entendimiento.  
Él rogaba que no lo desampare, que no lo deje caer frente a las personas que desean su mal y los soberbios, que muchas veces son nuestros vecinos, compañeros de trabajo, gente que nos rodea, que vive y sigue los caminos del mundo, y no la Ley de Dios (Vs. 121, 122). Pero él, antes de pedirle esto a Dios, tomó una decisión: amar la Palabra y rechazar el camino de mentira, el camino del mundo (V. 128).  
Como dije antes, él amaba tan profundamente las Escrituras, que no había cosa material que fuera más relevante que los Mandamientos. Por eso, él le entregó su vida a Jehová, se hizo su sirvo, dejó que Él dirija sus pasos (V. 124). Al ser tan importantes las Palabras para él, le pidió a Dios sabiduría para entenderlas, porque deseaba comprenderlas y meditarlas con todo su corazón (V. 125)

Nosotros debemos hacer lo mismo, pedirle que nos enseñe lo que desea que hagamos; debemos amar y desear con nuestro ser  seguir sus Estatutos, porque al igual que en la época que fueron escritos estos versos, hoy existen quienes intenten invalidar su Palabra, que desean disminuir su poder y su trascendencia (V. 126), y para estar firmes frente a esto, es necesario conocer la Biblia y comprenderla.
 Nosotros somos sus siervos, es tiempo de actuar… 





martes, 22 de septiembre de 2015

Samec

     


 Sámec

113 
Aborrezco a los hombres hipócritas;

    Mas amo tu ley.
114 
Mi escondedero y mi escudo eres tú;

En tu palabra he esperado.
115 
Apartaos de mí, malignos,

Pues yo guardaré los mandamientos de mi Dios.
116 
Susténtame conforme a tu palabra, y viviré;

Y no quede yo avergonzado de mi esperanza.
117 
Sosténme, y seré salvo,

Y me regocijaré siempre en tus estatutos.
118 
Hollaste a todos los que se desvían de tus estatutos,

Porque su astucia es falsedad.
119 
Como escorias hiciste consumir a todos los impíos de la tierra;

Por tanto, yo he amado tus testimonios.
120 
Mi carne se ha estremecido por temor de ti,

Y de tus juicios tengo miedo.


Sabemos todas las bendiciones y las buenas consecuencias si seguimos y meditamos su palabra cada día, pero aveces nos es difícil y nos cuesta.
El enemigo constantemente esta tratando de que la palabra de Dios no llegue a nuestra vida, nuestro desanimo y vagancia también son un obstáculo para seguir su palabra; pero que mejor que orar y pedir a Dios que renueve nuestro pensamiento y corazón para anhelar sus dichos cada día y poder decir las mismas palabras que este autor del salmo: amo tu ley, en tu palabra es puesto mi esperanza, SUSTÉNTAME conforme a tus promesas, siempre optare por tus decretos, amo tus estatutos y siento reverencia por tu ley!
No es fácil decir estas palabras pero es una decisión amar la ley ; si queremos que nos valla bien en todo lo que hacemos, debemos seguir su ley y no olvidar la como dice santiago 1:25, pero sobretodo haremos feliz al que dio su vida por nosotros, si le seguimos por medio de su palabra y hacemos todo lo que el manda!




...

viernes, 18 de septiembre de 2015

¡Oh, cuanto amo tu ley!


Mem
¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación. Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientos, Porque siempre están conmigo. Más que todos mis enseñadores he entendido, Porque tus testimonios son mi meditación. Más que los viejos he entendido,
Porque he guardado tus mandamientos; De todo mal camino contuve mis pies, Para guardar tu palabra. No me aparté de tus juicios, Porque tú me enseñaste. ¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca. De tus mandamientos he adquirido inteligencia; Por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.

El salmista nos enseña al menos dos cosas: el significado que tiene la palabra de Dios en su vida y al mismo tiempo nos dice que significará lo mismo en cada uno de nosotros, siempre y cuando meditemos en ella cada día de nuestra vida.
Es de notar en este párrafo la reiteracion de la palabra “porque”, que nos introduce al tema que explica, por ejemplo: “Más que todos mis enseñadores he entendido ´porque´tus testimonios son mi meditación”. 
Como seres humanos nos agrada pensar en lo que amamos. Si amamos la Biblia, nos agradará llevarla en el celular, en el ipod o de todos modos en el papel, en la cabeza y en el corazón para pensar en ella.
Por meditar los testimonios de Dios entenderemos más que nuestros profesores, (v.99) porque la palabra escrita es la guía más segura a la verdad, más que todo lo que nos puedan enseñar los padres, los profesores y pastores de la Iglesia.
V. 97 En el comienzo nos brinda el secreto principal, “¡Oh, cuánto amo yo tu ley!”.  Con esa expresión quiso decir que no tenía palabras para expresar todo el amor que sentía. Eso significa que él la leía, la escuchaba en su pensamiento, la meditaba y la ponía en práctica. La voluntad de Dios trae gozo, paz, propósito, amor y esperanza al espíritu del hombre.
Nos llama la atención el énfasis que pone David en la necesidad de meditar en la palabra de Dios todo el tiempo. La palabra meditación envuelve una profunda determinación del aprender de Dios. En hebreo, esta palabra meditación significa aquellos sonidos o murmullos que la persona hace cuando medita, o reflexiona en voz baja. Así como cuando Ana oraba en el templo;  (1° Samuel 1:12-13). La palabra de Dios siempre debe de estar en nuestro corazón y en nuestra mente.
La palabra traducida a nuestro idioma español, viene de una palabra que significa estudiar con devoción, reflexionar, involucrando una profunda determinación de aprender de la palabra de Dios. Todo lo contrario a leer solo por leer; se puede ilustrar la meditación con lo que hace una vaca cuando está rumiando su comida, revolviéndola una y otra vez. Esta meditación es cuando uno estudia, piensa, analiza y medita en la palabra de Dios una y otra vez. Las razones para hacer esto son las siguientes:
1- Para reconocer a Dios como el autor de ella.
2- Para que las podamos entender y digerir, (Deuteronomio 29:29; "Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley.").
3- Para entender el contexto.
4- Para considerar todo lo que la Biblia dice de una cuestión o tema.
5- Para adquirir inteligencia (v.104) 
Mientras más entendimiento obtengamos de los preceptos de Dios, más arraigado será nuestro odio del mal; y más preparados estaremos en las Escrituras y mejor equipados  para responder a la tentación.
Amemos la ley de Dios, poniendo en practica lo que en ella dice y llenando la redes de los cielo cumpliendo con su mandato. 
Dios les bendiga en gran manera!!