Mostrando entradas con la etiqueta propósito. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta propósito. Mostrar todas las entradas

sábado, 31 de diciembre de 2016

Larga vida y Prosperidad

Seguramente muchos, o todos se estén preguntando ¿Porqué la imagen del señor Spock en un devocional cristiano? Otros quizás no sepan siquiera quien es este tipo. Pero no se preocupen por que tiene una explicación.
Spock es un personaje famoso dentro de la cultura pop o cultura popular, perteneciente a la serie "Viaje a las estrellas". El por qué de traerlo aquí es por su característico saludo, hacia ese gesto con su mano y repetía la frase "Larga vida y Prosperidad", llegando al último día del año tenía dos opciones, o escribir sobre los balances que se acostumbra hacer en estas fechas o sólo dejar mis deseos para nuestros lectores.
Opté por este, mis deseos son los mismos que los de Spock.
Ahora bien, hablar de prosperidad entre cristianos puede sonar raro, muchos habrán oído hablar de esto en boca de muchos predicadores, en muchas Iglesias y ciertamente, ese no es mi mensaje, hay quienes hablan de seguir a Cristo=crecimiento monetario y a eso le llaman prosperar. Veamos algunos versículos para entender mejor que dice Dios de ser prósperos.

El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.
Proverbios 28:13

Y ellos le dijeron: Pregunta, pues, ahora a Dios, para que sepamos si ha de prosperar este viaje que hacemos.
Jueces 18:5

Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.
Josué 1:8

así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.
Isaías 55:11

El significado de prosperidad en el diccionario como en la Biblia es el mismo, significa tener éxito, tener un buen fin, que salga bien. En estos pocos versículos que he citado podemos ver varias cosas, cómo que aquel que se guarda el pecado para si "no termina bien" o que depende sólo de Dios que "nos vaya bien" pero hay otra cosa más importante y es que, al igual que a su palabra, el Señor prospera o da éxito a los propósitos para los cuales estamos hechos.

Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará.
Sal. 1:3

Aquellos que seguimos a Cristo sabemos que todo es por El y para El. Mi deseo para ustedes es de prosperidad, que este nuevo año miremos para que fuimos llamados y procuramos el éxito en las cosas del Señor.
Por cierto, casi me olvido, también fue en mi deseo "larga vida!" Y esto es, a los que aún no han decidido llamar al Salvador a sus corazones, sepan que, sin Él, no hay vida.

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan. 3:16

Cree en el Hijo de Dios y tendrás una vida tan larga que superará los límites de este tiempo. Sin más:
LARGA VIDA Y PROSPERIDAD

miércoles, 6 de abril de 2016

Abraham: Eligió confiar en lugar de cuestionar ☺

La galería de los héroes de la fe en Hebreos 11, parece una de esas historias emocionantes que escuchan los niños antes de dormir, y por las cuales no quieren dormir hasta escucharlas hasta el final. La fe de estos hombres marcó sus propias vidas, marcó la historia, y hoy puede marcar nuestras vidas también. Hoy, la fe de Abraham tiene algo que enseñarnos:

"Fue por la fe que Abraham obedeció cuando Dios lo llamó para que dejara su tierra y fuera a otra que él le daría por herencia. Se fue sin saber adónde iba. Incluso cuando llegó a la tierra que Dios le había prometido, vivió allí por fe, pues era como un extranjero que vive en carpas. (...) Abraham confió en Dios (FE) y, por eso, aunque su esposa Sara no podía tener hijos y él era ya muy viejo (sus circunstancias), Dios le dio fuerzas para tener un hijo. Y es que Abraham confió en que Dios cumpliría su promesa. (...) Abraham confió en Dios cuando Dios quiso probar si él lo obedecería o no. Por eso Abraham tomó a su hijo Isaac para ofrecerlo como sacrificio. No le importó que fuera su único hijo, ni que Dios le hubiera prometido que por medio de Isaac tendría muchos descendientes. Abraham sabía que Dios tiene poder para hacer que los muertos vuelvan a vivir. Esa confianza hizo que Abraham no tuviera que matar a su hijo; y fue como si Isaac hubiera vuelto a vivir."

Cuántos cuestionamientos hubiese podido tener Abraham. "¿Por qué tengo que dejar mi seguridad y comodidad, para emprender un viaje cuyo destino no conozco?", "¿Será que Dios verdaderamente puede darnos un hijo, a pesar de nuestra edad?" O, "¿Por qué Dios me está pidiendo que haga un sacrificio humano, si nunca antes lo había hecho? ¿Cómo voy a tener una gran descendencia, si le quito la vida al único hijo que tengo?"
Cuando pasamos por pruebas, nuestra mente es susceptible a llenarse de dudas y cuestionamientos. Abraham no fue un hombre perfecto ni sin sufrimientos. Tuvo equivocaciones, tuvo que esperar con paciencia a que se cumpla la promesa de Dios, tuvo que enfrentar circunstancias adversas. Pero hay algo de su vida que debe quedar grabado a fuego en nuestros corazones: A pesar de sus circunstancias, Él confiaba en quién era Dios. Su fe no estaba en lo que veía o en lo que le parecía lógico, sino en lo que conocía de Dios, y en base a esa fe vivió.
Quien lo llamaba a emprender un viaje con destino desconocido, era el Dios que lo conoce todo. El que le dijo que haría algo que no era naturalmente posible, era el Dios de lo imposible. Aquel que le pidió que entregara a su amado hijo, no era nada menos que el Dios digno, poderoso, fiel y bueno.

Si durante una prueba miramos nuestras circunstancias, nuestra fe se puede esfumar de un momento a otro. Pero si en la prueba nos enfocamos en las promesas de Dios y en quién es Él, todo cambia. En las pruebas, podemos:
1. Conocer lo que hay en nuestro corazón. (Deuteronomio 8:2, 2° Crónicas 32:30)
2. Conocer más de Dios. (En el sufrimiento vas a poder conocer que Dios es tu consuelo; en la soledad vas a poder conocer que Él es la mejor compañía; en cualquier situación, vas a poder conocer que Él es fiel.) Él usa las pruebas para enseñarnos y purificarnos. (Job 23:10)

Pensemos...
- ¿Por qué pruebas pasé, o estoy pasando?
- ¿Cuestioné lo que Él hizo / hace / me pide? ¿Qué reina en mi corazón: mis dudas o Su palabra?
- ¿A qué promesas, y a qué características de Dios debo aferrarme durante las pruebas?

Cuando cambiemos los temores por la fe, cuando decidamos como Abraham creer ciegamente en Sus promesas, cuando obedezcamos aún sin entender, cuando tengamos esperanza a pesar de las circunstancias, cuando nos juguemos por Dios dejando a un lado las baratijas que este mundo nos ofrece... vamos a honrar a Dios con nuestra fe, y esa fe nos va a permitir experimentar el poder y la fidelidad de Dios de maneras que ni siquiera imaginamos. ☺




"Nunca tengas miedo de confiar un futuro desconocido a un Dios conocido."
- Corrie ten Boom

viernes, 27 de noviembre de 2015

Pedir, confiar y recibir



"¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís.
Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites." 
Santiago 4:1-3

     Tratar vs. confiar: Tratar es intentar lograr algo por medio de nuestros propios esfuerzos y posibilidades. Está bien el esfuerzo, pues nosotros tenemos que hacer nuestra parte en ciertas cosas, pero siempre conscientes de hacerlo con la ayuda de Dios, quien nos da poder y gracia en nosotros; sabiendo que "separados de Él nada podemos hacer" (Nuestros estudios, ministerios, trabajos, metas, relaciones y debilidades). Pero los esfuerzos naturales y/o carnales, solo producen frustración, fatiga y desilusión.

Ahora, muchas veces nos topamos con estos sentimientos incluso cuando buscamos Su voluntad, y es que a veces es tan clara que nos tiramos a la pileta tratando por nuestros medios alcanzarla, cuando suceden esas contiendas entre hermanos, y los desacuerdos (ver: Puestos los ojos en Jesús) Santiago menciona el porqué: DESEOS INCORRECTOS, malintencionados, es la naturaleza humana que siempre quiere la gloria para sí.
 (Codiciáis, matáis, ardéis de envidia, combatís y lucháis) tomo estas palabras para representar todo tipo de intento humano de alcanzar algo, lo cual no logramos... ¿Porqué? "porque no pedís"
       
       Recibir vs. Conseguir:Debe cesar todo intento de hacer las cosas por nuestras fuerzas, para permitirle a Dios obrar a Su manera y a Su tiempo. Quejarnos y seguir intentando nos lleva a perder tiempo y energía, eso es lo que causa frustración y desánimo. Pero muchas veces, inclusive pidiendo, creemos que Dios no nos quiere dar lo que queremos...
Santiago 4:3 nos da la respuesta a cuando no recibimos lo que pedimos: 
"Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites"
Claro! Muchas veces nuestros deseos no son malos, pero para recibir necesitamos una previa preparación, pero en cambio, a veces sí tenemos motivaciones que no le dan la gloria a Dios y a veces ni lo sabemos! 

Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón;
Pruébame y conoce mis pensamientos;
Salmo 139:23

Dios nos conoce más que nosotros mismos, y en eso consiste la preparación para recibir: Que nuestras motivaciones cambien de:
              EGOÍSMO AMOR                                
              VANAGLORIA GLORIFICAR A DIOS
y si aún no estamos listos para recibir lo que pedimos, estamos fuera de tiempo, tanto por eso o porque no es el tiempo para el propósito que Dios tiene con lo que pedimos.


"Déjenme hacerles una pregunta: ¿recibieron al Espíritu Santo por obedecer la ley de Moisés? ¡Claro que no! Recibieron al Espíritu porque creyeron el mensaje que escucharon acerca de Cristo. ¿Será posible que sean tan tontos? Después de haber comenzado su nueva vida en el Espíritu, ¿por qué ahora tratan de ser perfectos mediante sus propios esfuerzos? ¿Acaso han pasado por tantas experiencias[a] en vano? ¡No puede ser que no les hayan servido para nada! Vuelvo a preguntarles: ¿acaso Dios les da al Espíritu Santo y hace milagros entre ustedes porque obedecen la ley? ¡Por supuesto que no! Es porque creen el mensaje que oyeron acerca de Cristo."
Gálatas 3:2-5

    Por esto es tan importante la confianza, porque la espera, este tiempo de preparación muchas veces se torna en sufrimiento, en decepción, dudas y frustración; y la espera no tiene que ser frustrante si usamos ese tiempo para aprender más de Su gracia, no para intentar lograr lo que deseamos por nuestros medios: 

"Confía en el Señorcon todo tu corazón;
    no dependas de tu propio entendimiento."
Proverbios 3:5

 Confiar en Dios, en Su poder y en sus planes, para no frustrarnos apoyándonos en nuestras fuerzas, conocimientos y planes. ¡Dios siempre tiene algo mejor! 

"Y estoy seguro de que Dios, quien comenzó la buena obra en ustedes, la continuará hasta que quede completamente terminada el día que Cristo Jesús vuelva."
Filipenses 1:6

  "Dios siempre termina lo que comienza, pero la espera nos ayuda a echar raíces y fundamentos en Él." Joyce Meyer

Que Dios bendiga Su palabra y hable en tu corazón en este día!

viernes, 6 de noviembre de 2015

Puestos los ojos en Jesús




"Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios."
Hebreos 12:1-2


   Hace un tiempo vengo pensando mucho este tema, ¿En quién se fijan nuestros ojos?
Acá Pablo describe un poco la vida del cristiano, o lo que debería ser: "la carrera que tenemos por delante" seguir a Cristo hasta su segunda venida, A CRISTO: Vivir como él vivió, predicando de la salvación por medio de la FE en Él.
  Pero hoy quiero tomar esta porción y referir al peso y pecado con dos significados: 
"teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos" ¿Porqué despojarnos del peso y pecado que nos asedia? Porque estos testigos pueden ser:
  • No creyentes: Debemos despojarnos del pecado, para dar testimonio. ¡Debemos mostrar a Cristo con nuestra vida! Primero que todo: ¡La mejor forma de predicar el evangelio es con nuestra propia vida! No podemos agradar a alguien, haciendo lo que esa persona aborrece, y eso es el pecado para Nuestro Padre, seguimos a Quien murió para librarnos del pecado; no volvamos al lugar del que nos sacó.
  • Hermanos en la fe: Debemos despojarnos del peso, interpretemos peso como lo que cargamos en el corazón que nos impide estar gozosos en Cristo pero hoy hablemos de un peso especial: lo que refiere a nuestros hermanos. Puede ser envidia, puede ser recelo, enojo, cualquiera sea el sentimiento QUE NO EDIFICA  respecto a algún hermano, puede generar algo peor: chisme, tropiezo en mi hermano y finalmente odio, para terminar en AMARGURA. 


   Normalmente esto sucede lamentablemente, por servir a Dios inclusive, un don o talento que no tenemos puede llevarnos a envidiar, una tarea que no nos encomendaron pueden generar recelo en nosotros, una mala actitud puede terminar en enojo, y estas cosas generan un peso.

"Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo." Salmos 37:8

"El corazón apacible es vida de la carne; Mas la envidia es carcoma de los huesos." Proverbios 14:30
"Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad" 
Santiago 3:14
 Todos estos sentimientos, conllevan una consecuencia, no tan buena ni edificante: Hacer lo malo, empeorar la situación, generar más discordia que paz. Generar amargura para nosotros mismos, sin permitirnos gozar de lo que DIOS NOS DA A CADA UNO con UN PROPÓSITO. Mentir contra la verdad, y muchas veces generar CHISME, el cual Dios no aprueba: "No andarás chismeando entre tu pueblo. No atentarás contra la vida de tu prójimo. Yo Jehová." Levitico 19:16
 Todas estas cosas son pecado y como ya sabemos, del pecado no sólo debemos despojarnos para dar testimonio, sino porque nos aleja de Dios, y estos mismos sentimientos que empiezan por cosas pequeñas, generan grandes consecuencias, y perjudica principalmente nuestra vida.
  Pero a veces, mediante esto llamado "chisme" también estamos del otro lado, podemos ser a quienes envidian, celan, con quienes están enojados...
 Dios a través de Pablo nos da la solución a estas cosas que suelen sucedernos: PONER LOS OJOS EN JESÚS y menciona algo más: "AUTOR Y CONSUMADOR DE LA FE" la fe que decimos tener, de la que contamos a otros, solo JESÚS es el autor de esa FE, sólo JESÚS murió en una cruz para salvarte, no importa que haga el otro para agradar a Dios, no importa que dice el otro de lo que haces de corazón para engrandecer su nombre, ambos trabajan con el mismo propósito, y eso importa. Sea que estés de un lado o del otro, además de la necesidad de arreglar las cosas con nuestros hermanos: 
"Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros." Colosenses 3:12-13 
No sólo por nuestro hermano, y por mí, sino por MI RELACIÓN CON DIOS. Ese es el modo de despejarnos del peso, llevándolo en ORACIÓN y buscando en la Palabra de Dios qué es lo que Él espera de nosotros. 
¿Porqué? Porque es ahí donde debemos fijarnos para continuar en carrera. Porque Al que está a la diestra del trono debemos agradarle, porque es él quien aboga por nosotros, no mi hermano. ¿Es fácil? Claro que no! Se necesita paciencia para soportar, amor para perdonar y pedir perdón, mansedumbre para confrontar y solucionar y humildad para reconocer nuestro peso, nuestro pecado. ¿Cuál sentimiento estoy sembrando en mi corazón que no edifique? ¿Tengo enojo contra algún hermano? ¿Genera amargura en mi corazón que se digan de mí cosas que no son verdad, o me consuela saber que Dios en mi intimidad conoce mi corazón? 
  
 No miremos más para el costado ¿Qué hace mi hermano? ¿Qué dirán de mi?  permitiendo que un tropiezo o desvío cada vez más nos alejen de Dios, y nuestra meta.   Miremos a Cristo, la meta de nuestra carrera, a quien le debemos nuestra salvación y quien alimenta nuestra fe Que nuestra pregunta sea ¿Qué desea Cristo que haga? "Si Dios me pone acá es por un propósito, si mi hermano trabaja allí, será porque es mas útil que otro para la obra de Dios en ese lugar, si la boca de mi hermano se levanta contra mí ¿Algo mal estaré haciendo? Si todo está bien en mi intimidad con Dios, debo ayudarle a ver su error en no decirme primero a mí. Oraré a Dios por este sentimiento." 
   Deseo que Dios moldee tu vida a través de la lectura de hoy y estos sean nuestros pensamientos como seguidores de Cristo la próxima vez que esos sentimientos asomen, conforme a Su palabra. 

"Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo." 1 Tesalonisenses 5:23

  
¡Dios bendiga nuestra carrera! 

jueves, 26 de junio de 2014

Somos obra de sus manos


Es en momentos de aflicción donde nos replanteamos muchas cosas. Donde surgen preguntas a las cuáles sólo Dios sabe el porqué. Cuando en la familia hay problemas, cuando una persona importante para nosotros nos falla, cuando una relación amorosa no funciona, cuando perdemos a un ser querido... somos expertos en 'hacernos la cabeza'. 
Terminando el mes del Dia del Padre, no pude evitar pensar en lo importante que es un padre en la familia, es el guía, la cabeza de la familia y cómo influye en nosotros lo que piensen y hagan. Hoy quiero explayarme más en los problemas familiares, lo que es muy común hoy en día. Muchos nacimos y crecimos en familias cristianas, pero no es la realidad de todos. Puede que seamos 'un error' para nuestros papás, aunque incluso hayamos nacido dentro de un matrimonio. Puede que aún así, hoy en día suframos una separación o una convivencia conflictiva, o también puede ser que seamos los únicos creyentes en nuestra casa, y nuestra familia se oponga o no a nuestra Fe, pero, cómo desanima esa situación! Cualquiera sea tu situación familiar hoy, quiero decirte que nada de lo que estás viviendo no fue antes planeado por Dios.

No sos un error, nada de lo que tus papás te digan en un momento de furia o discución respecto a tu existencia es cierto. David en Salmos 139:16 dijo a Dios:
"Mi embrión vieron tus ojos,
Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas
Que fueron luego formadas,

Sin faltar una de ellas."
¿No fue tu papá y tu mamá quienes te planearon? ¡No importa! Es Dios quien planeó de antemano que existieras, Efesios 2:10 dice
"Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas." 

Y como todo lo planeado tiene un porqué, Dios nos creó con un propósito, también David expresa en un Salmo muy conocido: 138:8 
"Jehová cumplirá su propósito en mí;
Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre;
No desampares la obra de tus manos."

¡Qué hermosas promesas del Más Grande! ¿Cómo sentirnos sin un propósito, sin una razón por la cual vivir, si somos obra del mejor diseñador?

Dios es nuestro Padre Celestial, además de ser hijos de nuestros padres, no hay que olvidarnos que SOMOS HIJOS DE DIOS. Y esto es así en todos los aspectos, como David expresó en Salmos 27:10
"Aunque mi padre y mi madre me dejaran,
Con todo, Jehová me recogerá."
No importa cuánta sea la carga que llevas, Su Misericordia es eterna y nunca nos dejará solos, aún así cuando no te sientas acompañado por tus mismos padres, Dios está con vos.
Otra promesa encontramos en Isaías 49:15
"¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti."
Dios es un padre perfecto, es quien está siempre con nosotros, aunque nosotros no lo tengamos en cuenta, es quien siempre se dispone a escucharnos y tiende su mano de auxilio. No dudemos de Su fidelidad!

No nos dejemos engañar por pensamientos que las situaciones que vivimos hacen que tengamos, ni dejemos que la aflicción nos aleje de Dios, al contrario, aprovechemos esos momentos para dejarlo actúar a Él en nosotros, para afianzar nuestra relación, acercarnos más a Nuestro Papá Celestial, como dice en 2°Corintios 12:9-1
"Entonces Él me dijo: «Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad». Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí. Es por esto que me deleito en mis debilidades, y en los insultos, en privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo. Pues, cuando soy débil, entonces soy fuerte." (NTV)

Es cuando estamos en momentos de aflicción también, que nuestro corazón se sensibiliza y cuando de verdad, sentimos lo que leemos en Su palabra. ¿No es realmente un privilegio ser Hijos de Dios? Es increíble encontrar estas promesas de aliento de Su parte, sabiendo que Él no nos va a fallar, y otra vez demostrándonos que Su amor es lo más grande que hay! 

Si estás pasando por un momento como los que mencioné al principio, espero que te haya sido de ayuda y aliento este devocional... Somos de gran estima para el Dueño del mundo, que nada de lo que puedan decirte te haga dudar de ello: 
"Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé; daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida." Isaías 43:4


Dios te bendice! 

lunes, 9 de junio de 2014

Una obra en construcción

     

      Cuando iba a la escuela primaria cruzaba todos los días por una esquina en la que tiempo atrás había un terreno vacío; sólo pasto en ese lugar. Pasaron días y meses, hasta que pude ver que habían puesto ahí unos ladrillos y otros materiales. Más adelante fueron construidos los cimientos, y poco tiempo después vi que habían levantado unas paredes. Había visto todas las semanas como iba avanzando la construcción, y después de haber empezado la secundaria, vi al pasar por ahí que esa construcción que de a poco vi avanzar, hoy es una hermosa casa.
      Si no hubiese sido por los constructores que trabajaron día tras día en ese lugar, sólo hubiesen quedado los materiales, solos y sin ningún propósito. Era una obra que alguien comenzó, y que de a poco se fue terminando.
      En la Biblia podemos ver que Pablo le dice a los Filipenses:
“Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes
la irá perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús.”
(Filipenses 1:6, NVI)
      ¿Quién es el que comenzó una obra en ellos, quienes estaban en Filipos? El mismo que también empezó una obra en vos y en mí. Dios trabaja en la vida de sus hijos amados.
      Cuando nos encontramos con Dios y cuando leemos Su Palabra nos damos cuenta de la condición de nuestro corazón, vacío y en ruinas a causa del pecado. ¡Un terreno en el que Dios quiere obrar!

      Esta buena obra es Dios quien la puede hacer. Él es quien puede nos transformar, corregir, restaurar y llenarnos de Él. Nuestra parte es rendirnos a lo que Él quiere hacer en nuestra vida, que lo vamos a poder ir descubriendo a medida que conocemos Su Palabra, la cual tiene un poder inmenso para obrar en nosotros (como dice Hebreos 4:12). Esta obra, hasta el día de Cristo Jesús, Dios la quiere ir perfeccionando; esto quiere decir: ¡continuamente!
      ¿Viste alguna vez una construcción detenida por mucho tiempo? ¡Da lástima! Da lástima ver que está el terreno y los materiales, pero uno sabe que hay algo que impide que siga avanzando y que se complete. Qué lástima sería que la obra de Dios se detenga por un tiempo en nosotros, ya sea porque descuidamos nuestra relación con Él, o porque hay algo que no queremos dejar, o porque no le obedecemos del todo, o porque nuestro corazón se resiste a hacer Su voluntad y a Su obrar. ¡Dios no quiere eso!
      Muchas veces también habrá cosas que Dios va a tener que derribar para construir algo nuevo. Quizás un mal hábito que debe acabar, un ídolo que le quita Su lugar, algo en nuestra mente que se debe renovar, y más. ¿Te animarías a pedirle a Dios que destruya lo que tiene que destruir, para que obre de la manera en que quiere hacerlo? Es un gran desafío, pero no tengo dudas de que pedirle que se haga Su voluntad, siempre, siempre, siempre es lo mejor.
      Qué bueno que Dios sea paciente con nosotros, y siga obrando en nuestro corazón a pesar de que muchas veces nos cueste obedecerle y llegar a ser como Él. Qué bueno sería que también nosotros seamos más tolerantes con las faltas de los demás, sabiendo que Dios también está trabajando en el corazón de ellos, y no terminó de hacerlo todavía.
      Ese mismo Pablo, en su carta a los Romanos (vers. 5:3-5) dice que se goza en sus tribulaciones porque la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza. También dice que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman (v. 8:28). Entiende que las circunstancias y las experiencias que vive son otra manera más en la que Dios obra en Él. Así Dios lo hace en nosotros también; busquemos qué es lo que quiere hacer Dios en nosotros a través de cada situación en la que nos pone. Quizás nos demos cuenta de Su obrar, y quizás no lo entendamos, pero confiemos en Él aunque no lo veamos, ¡tengamos fe!

      Pensemos si estamos dejando obrar a Dios en nosotros o nos estamos resistiendo a que lo haga. Pensemos si hay algo que está impidiendo que Su obra en nosotros continúe como debería continuar. Pensemos si no estamos siendo pacientes con los demás y el obrar de Dios en ellos. Pensemos qué es lo que Dios está queriendo hacer en nosotros con eso por lo cual estamos pasando hoy; confiemos en Su obrar.
      ¡Que Dios te bendiga! Y que podamos decir, como dijo David:

El SEÑOR cumplirá su propósito en mí
Tu misericordia, oh SEÑOR, es para siempre;
No desampares la obra de tus manos.”
Salmos 138:8
En Versión Dios Habla Hoy:
“¡El Señor llevará a feliz término su acción en mi favor!
Señor, tu amor es eterno;
¡no dejes incompleto lo que has emprendido!” 

jueves, 3 de abril de 2014

#VersículoDelDía



"Todo lo que Dios hace tiene un propósito." Prov. 16:4 (TLA)
Nada se le escapa. Todo lo que pasa es parte de su perfecto plan.