martes, 14 de abril de 2015

Camino a Emaús

Lectura: Lucas 24:13-35


En la lectura podemos observar que todos estaban conmovidos y preocupados por la muerte de Jesús.
También vemos que estos discípulos que venían caminando no comprendieron bien la más grande historia; se preocupaban más en sus problemas y desilusiones, eso no les permitió ver que la persona con la que caminaban era Jesús.

Esta historia nos invita a pensar:
  • Jesús es nuestra mejor compañía.

Él siempre está ahí para animarnos y consolarnos, darnos luz y abrir nuestro entendimiento. Pero   muchas veces nos dejamos cegar por nuestros problemas, dificultades o desánimos y no disfrutamos de su hermosa compañía, no podemos ver  que Él siempre está a nuestro lado deseando que disfrutemos de su amistad.

No hay nada más placentero y hermoso que saber que Jesús siempre sale a nuestro encuentro.
  •    Jesús es el mejor predicador para nuestros oídos.

Él siempre tiene la palabra justa para darnos. En su palabra, la biblia,  podemos encontrar palabras de aliento, consuelo, palabras con la que podemos encaminarnos y aprender más de Él.

“Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino, y cuando nos abría las Escrituras?” Lucas 24:32

Los discípulos empezaron su camino con un corazón triste y apago pero terminaron con un corazón ardiente, con sus ojos y su entendimiento abierto. Recién ahí pudieron disfrutar de la presencia de Jesús y entender sus palabras.

No dejemos que nuestros problemas, desánimos nos cieguen y nos saquen el deseo de compartir tiempo con Jesús y aprender más de su palabra.

¡¡Que podamos cada día disfrutar de su presencia!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario