Lectura: Juan 12:1-8
La anteúltima noche. Cerca de 48 horas antes que Jesús sea juzgado y colgado de una cruz se encontraba en casa de sus amigos (en Betania, a unas 30 cuadras de Jerusalén) disfrutando de lo que podría considerarse como una “buena juntada de amigos”. Reencuentros, risas, charlas, anécdotas, cena, contribuían a un ambiente algo familiero, más profundo que una simple amistad; allí se podía percibir la libertad para ser y sentir libres de formalidades y protocolos; entre ellos había confianza cultivada por tres largos años. Bah, no para todos era disfrutable ese entorno ya que siempre hay un inadaptado como Judas que no puede despegarse de los protocolos (mejor dicho usan los protocolos como excusas porque aprendieron a sacarle provecho para ellos mismos). Es por eso que actitudes tan sinceras, desprendidas y en confianza como le resulto a María derramar su perfume en Jesús (pies y cabeza, Mt. 26:7) ofendieron a los inadaptados en esa época, y les sigue ofendiendo ahora. Solo aquellos que logran la confianza de familia con Jesús llegan a ser adoradores talco (Efficient) como lo fue María, adoradores de pies blancos (pies santos).
Te invito a que en este día puedas animarte a tomar la actitud de esta mujer, repasa las tres ocasiones en que María adora a Jesús de manera “Efficient” y medita como podrías llevarlo a cabo.
1) Lucas 10:38-42
2) Juan 11:32 (contexto Jn. 11:1-44)
3) Juan 12: 1-8
Según estos pasajes.
- ¿Hay un lugar y momento específicos para ir a los pies de Jesús?
- ¿Cómo responde Jesús a la actitud de María, y qué postura toma con respecto al entorno inadaptado? ¿Cuál de estas dos posturas quieres que Él tome hoy con respecto a vos?
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