¿Para qué leer la Biblia?

¿Alguna vez te dolió la panza de hambre? Que sensación fea…

Algo parecido nos pasa muchas veces en nuestra vida espiritual y no nos damos cuenta. Tenemos hambre de su palabra y no nos molestamos en alimentarnos.
"Ven con tu amor a darme ánimo, pues soy feliz con tus enseñanzas…" Salmo 119:76 (TLA)
Ese vacío espiritual, esa hambre de amor que muchas veces sentimos, solo se puede llenar con Dios, con su palabra. No perdamos el tiempo intentando encontrarlo en otras cosas.
Y  su palabra no solo nos va a llenar del amor de Dios sino que también nos va a ayudar a responder a los demás con sabiduría…
"Así podré responder a mis enemigos. Permíteme hablar con la verdad, pues confío en tu palabra." Salmo 119:42-43 (TLA)
A saber que decisiones tomar…
"Tu palabra es una lámpara que alumbra mi camino."  Salmo 119:105 (TLA)
A corregir nuestros errores… 
"Sólo obedeciendo tu palabra pueden los jóvenes corregir su vida." Salmo 119:9 (TLA)

Nos va a dar consuelo…
"Cuando estoy afligido y en problemas, tus mandamientos son mi alegría." Salmo 119:143 (TLA)
Nos va a permitir ser bendecidos… 
"Dios, tú bendices a los que van por buen camino, a los que de todo corazón siguen tus enseñanzas." Salmo 119: 1-2 (TLA)
Nos va a dar alegría… 
"Yo amo y deseo tu palabra pues me llena de alegría." Salmo 119: 47-48 (TLA)
Dios nunca va a dejar de sorprendernos a través de su palabra. Cada día él nos puede revelar cosas grandes que todavía no conocemos.  Por medio de la Biblia Dios nos habla, nos enseña, nos guía y lo más lindo es que nos acerca a él y nos permite conocerlo cada vez un poquito más.
Y si guardamos, obedecemos y vivimos su palabra…
Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. 
Josué 1:8 (RVR)
Nuestro camino va a  prosperar y todo nos va a salir  bien, tal vez no de la manera que nosotros pensamos, pero a la manera de Dios, que conoce todo y quiere lo mejor para sus hijos.
Te animamos a que todos los días dediques aunque sea un ratito para  alimentarte y llenarte de su palabra, que en ella puedas saciarte y  descansar.
“…No te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.” Josué 1:7 

Escrito por: Yazmín Florit y Lizzy Esquivel