viernes, 9 de noviembre de 2012
Bendice, alma mía, a Jehová
Bendice, alma mía, a Jehová
Seguro estás de acuerdo conmigo si te digo que una de las cosas que normalmente le pedimos a Dios es bendición! Le pedimos que nos bendiga, que bendiga a otra persona, que bendiga los alimentos, entre otras cosas. Pero en la Biblia encontramos un salmo que no habla de Dios bendiciéndonos a nosotros, sino nosotros bendiciendo a Dios: el salmo 103. Pero cómo? No es que Dios ya tiene todo? Cómo podemos bendecirlo? Podemos bendecirlo dándole algo que Él no se da a sí mismo... las GRACIAS. No se trata de darle dinero ni alguna otra cosa material.
El salmo empieza así: "Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios." David empezó este salmo deseando bendecir a Dios. Y cómo lo hace? Si seguís leyendo el salmo, David escribe un montón de beneficios por los cuales él le agradece a Dios: perdón, salud, redención, misericordia, provisión, fortaleza, justicia, gracia, bondad... Él tenía muchísimos motivos para alabar y agradecer a Dios.
Nosotros también tenemos esos motivos, y estoy segura de que si cada uno de nosotros camina al lado del Señor cada día y deja que Él obre en su vida, cada día va a tener más motivos para agradecerle.
Que en este día, en esta semana y siempre, podamos bendecir a Dios: valorando y agradeciendo todas las cosas que nos da, que hizo por nosotros, que hace por nosotros y que todavía va a seguir haciendo.
Que al bendecirlo, Dios te bendiga! :)
Escrito por: Flor Usinger
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bendiciones amados hermanos desde mi blog www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com.
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