Jesús desde el primer momento impacto a las personas. Habían pasado 4 siglos desde el último profeta; y el pueblo solo estaba escuchando acusaciones, cuestionamientos y graves denuncias de parte de los religiosos.
Necesitaban "pastos frescos". Necesitaban alguien que les hable con amor, y a decir verdad, los escribas, fariseos y saduceos no estaban cumpliendo con las expectativas.
Jesús entró de nuevo en la sinagoga y vio a un hombre que tenía una mano deforme. Como era el día de descanso, los enemigos de Jesús lo vigilaban de cerca. Si sanaba la mano del hombre, tenían pensado acusarlo por trabajar en el día de descanso.
Jesús le dijo al hombre con la mano deforme: «Ven y ponte de pie frente a todos». Luego se dirigió a sus acusadores y les preguntó: «¿Permite la ley hacer buenas acciones en el día de descanso o es un día para hacer el mal? ¿Es un día para salvar la vida o para destruirla?». Pero ellos no quisieron contestarle.
Jesús miró con enojo a los que lo rodeaban, profundamente entristecido por la dureza de su corazón. Entonces le dijo al hombre: «Extiende la mano». Así que el hombre la extendió, ¡y la mano quedó restaurada! Los fariseos salieron enseguida y se reunieron con los partidarios de Herodes para tramar cómo matar a Jesús. Marcos 3:1-6 -NTV
El Hijo de Dios esta otra vez en una sinagoga, pero la situación es distinta. Un grupo de fariseos lo espera para ver si hace un milagro en el día de reposo y así tener motivos suficientes para acusarlo.
Jesús conociendo sus intenciones intenta hacerlos recapacitar y les propone "desobedecer" el 4º mandamiento (a los ojos de los religiosos la propuesta era DESOBEDECER).
Pensá por un momento en la actidud de aquellos hombre: ellos basados en sus años de estudio de la ley, su rigurosa doctrina y basta experiencia, entendían que lo que este desconocido decía y hacía estaba en contra de Dios. A tal punto defendían su postura que después del maravilloso milagro que Jesús hizo, ellos solo pensaban en matarlo.
Que triste es que como cristianos adoptemos las actitudes de los fariseos y hablemos mal u en contra de las personas que piensan distinto a nosotros. David tuvo la posibilidad de matar a Saúl, cuando este lo perseguía; aun así el decidió no tocarle ni siquiera un pelo, ni hablar mal del ungido de Jehová.
No empleen un lenguaje grosero ni ofensivo. Que todo lo que digan sea bueno y útil, a fin de que sus palabras resulten de estímulo para quienes las oigan. Efesios 4:29 - NTV
Este versículo no habla solamente acerca de decir malas palabras, sino que también nos enseña que no hay que hablar mal de nadie y mucho menos llevar chismes.
Jesús fue de bendición para el hombre con la mano deforme.
No hablemos mal, ni juzguemos a aquellas personas que piensan o tienen distintas formas a nosotros, mucho más si han bendecido la vida de otras personas y han sido utilizados por Dios. Con esto también quiero decir que si realmente lo que piensa el otro esta equivocado, dejemos que Dios se encargue, y sea el Juez justo quien juzgue.
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