quiero que me conozcan.”
Oseas 6:6
Antes que nada, quiero confesar, mi profundo encanto hacia
este versículo. No creo que pueda leer, tan claramente, lo que Dios quiere de
nosotros, como lo redacta el profeta Oseas en este pasaje.
Muchas veces, como cristianos, estamos muy ocupados,
pensando que es lo más importante, en la vida de un creyente. Y a partir de
esto sacamos posibles hipótesis de lo que ocupa el ranking de las cosas
infaltables, en la vida cristiana. Déjame mostrarte ejemplos que pensé, de lo
que la mayoría de los cristianos piensan que es lo primordial:
1: Congregarnos todos los domingos, todas
las reuniones de oración y a todos los encuentros posibles. Quiero decirte, que esto no es lo más importante, no es lo
primordial. Si es de mucha bendición para nuestras vidas, pero a Dios no le
interesa saber cuántas sillas están ocupadas en el templo, a Él le interesa que
su Iglesia siga confiando y creyendo. Sin ir más lejos, hay infinidad de casos
de personas que van a las reuniones a ocupar una silla, a mostrarse, a
aparentar estar conmocionado por el mensaje, siendo que en su corazón, nada pasa,
y está todo seco.
2: Ofrendar todos los domingos una
cantidad alta de dinero, sin importar que en la semana tenga que pagar mis
deudas. Otra cosa que muchos cristianos creen
que es lo más importante que deben hacer. Encontramos en la Biblia, pasajes que
hablan de la ofrenda, y es algo muy beneficioso hacerlo, pero no vamos a dejar
de pagar nuestras cuentas o deudas por ofrendar más de lo que podemos. Esto
Dios no lo prefiere. Debemos ofrendar con el corazón lo que cada uno pueda.
Tiempo, servicio, dinero, o donaciones.
3: Hacer un estudio bíblico profundo, sin poder
aplicarlo a nuestra vida. Todos sabemos de la importancia de leer la
Biblia, todos los días. De encontrar más cualidades de Dios y de aprender lo
que Él quiere. Pero no es lo primordial, es importante, si, pero no tiene que
ser lo único. Muchas veces personas que asisten a diferentes iglesias, piensan
que sabiendo todas las escrituras, son mejores, o agradan más a Dios, y a veces
en situaciones, hasta se olvidan del amor que el mismo Dios predica. Tener un
vasto y amplio conocimiento de las Escrituras no lo es todo.
Son sólo unos ejemplos, que podes ver o no más
frecuentemente. No por esto, hay que dejar de congregarse, de ofrendar y de
leer la Biblia, pero sí, no enfocarse ni encerrarse en estas cosas, y digo
estas, pero hay muchísimas más. Como podemos leer en Oseas, Dios prefiere que
lo alabes, no con ofrendas, si no con muestras de amor, no con sacrificios en
vano, si no, conociéndolo aún más. Dios no busca que ofrendes una cantidad de
dinero, Dios espera que lo busques todos los días, que ayudes a otras personas
que lo necesitan. Dios no se va a enojar si no pudiste ir a un encuentro de
oración. Dios no te va a juzgar si no te sabes cincuenta versículos de memoria.
Él sólo quiere ser tu amigo, que le demuestres el amor que le tienes a Él y a
tu prójimo y que tengas una hermosa relación, en donde diariamente, lo conozcas
más, lo alabes y sea el centro de tu vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario