La BIBLIA es la Palabra de Dios

Incontables veces escuchamos la frase “La Biblia es la palabra de Dios” no es ningún dato nuevo, pero muchas veces nos conformamos con saberlo y que es suficiente.  Y desconocemos de su exactitud a través del tiempo, de sus tan sabias respuestas a las preguntas del hombre.
La Biblia es la base del conocimiento, el apologista cristiano Josh Mcdowell   en su libro “evidencia que exige un veredicto” asegura que es más sabio un campesino que estudia la biblia, que un erudito por más cultura que tenga.
Hay diversas pruebas que confirman que la Biblia es inspiración de Dios. Durante siglos estuvo la gran duda de que el planeta Tierra está suspendido en el espacio. Las culturas antiguas no siempre fueron conscientes de esto. Los antiguos egipcios solían creer que la Tierra era sostenida por pilares. Los griegos creían que un gigante llamado Atlas cargaba el mundo en su espalda. Y los hindúes creían que la Tierra descansaba en los lomos de gigantescos elefantes, pero la palabra de Dios en el libro de Job (que posiblemente sea la pieza literaria más antigua que conoció el hombre) dice: "Él despliega el norte sobre el vacío y suspende la tierra sobre la nada"(Job 26:7).  ¿Cómo pudo saber él que la Tierra se suspendía en el espacio? Sólo pudo saberlo por inspiración divina.
Y casos como este hay muchos más, otro ejemplo puede ser “que la Tierra es plana” no fue hasta 1492 que Cristóbal Colon  descubre que la tierra era redonda, Pero Isaías, en el año 750 a.C. dijo: "Él Dios es el que está sentado sobre el círculo de la tierra..." (Isaías 40:22).  Queda claro que cada vez que sostenes ese libro en tus manos, dejame decirte que estas sosteniendo la palabra viva y eficaz del mismo Dios. Un libro que es capaz de leerte a vos y no vos a él. Que tiene el poder de cambiar vidas y de quebrantar hasta el más duro corazón (Hebreos 4:12). 
El apóstol Pablo sabe decir "Porque no me avergüenzo del evangelio; pues es PODER de Dios para salvación..."
Adrian Rogers comenta, “He estudiado este libro y nunca, ni siquiera en sueños, llegaría al fondo de la Palabra de Dios. la Palabra de Dios es tan profunda que los estudiosos pueden nadar y nunca tocar el fondo, y es tan preciosa que un niñito puede venir y beber de ella sin miedo a ahogarse”. En Jeremías 3:33 dice: Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces. 
T e desafío que cada día puedas tomar su palabra y escuchar las cosas grandes y ocultas que Dios tiene preparadas para vos!
Dios te bendiga ricamente!  :)


Escrito por: Joel Martinelli