En la comodidad...

A diario nos encontramos dentro de situaciones ajenas a nosotros pero de las cuales podemos destacar o aprender algo. Te cuento lo que ví.

Como de costumbre tome un colectivo luego del trabajo, para volver a mi casa.
A mitad de camino empece a observar que los varones que ibamos dentro del transporte habiamos demostrado ser caballeros cediendo nuestros asientos a las señoras que habían subido. Asi que todos los hombres ibamos parados y los asientos ocupados todos por el sexo femenino. Llegados a una parada, una señora que estaba embarazada sube al colectivo. Para sorpresa todos los asientos estaban ocupados por mujeres, a las que se les habia cedido el lugar por ser tales, así que ninguna de se levantaba de su lugar para darle el asiento. Hasta que alguien se percato de la situación y le cedio su lugar.

Fue muy gracioso para mí verlo, porque la mujer embarazada las miraba a todas con cara de asombro. Claro, se acostumbra a ceder el lugar a las mujeres, principalmente mayores y embarazadas, y como no había ningun varón ocupando lugar, en su comodidad nadie se levantaba.

Muchas veces nos encontramos frente a esta actitud de comodidad, la que no nos deja ver la Necesidad.
Poco nos interesa o conmueven las personas en necesidad cuando nosotros estamos bien. Es fácil darle nuestro vuelto, lo que nos sobra a quienes andan pidiendo.
Creo que a todos nos toca pasar por al lado de esas realidades que no son paralelas, nos incluyen, todos formamos parte de la sociedad, y tenemos que hacer algo.

Tenemos que administrar como se debe la Gracia. La solución no esta en dar más dinero o ser más generoso, el verdadero problema de la sociedad Toda es la falta de Gracia, la falta de un Dios Vivo y Verdadero. La Gracia se trata de esto, de que Cristo Jesús estando en los cielos en comunión con el Padre vino a la tierra a salvarnos. Dejo la comodidad del Cielo para venir a la tierra de maldad y cargar con una cruz por amor.

"Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. " Filipenses 2:5-8

No estoy en contra de la comodidad ni el dinero, estoy en contra de no ver la necesidad de los demás.
Debemos imitar la actitud de Cristo, salir de nuestro lugar de comodidad y generar un cambio, comenzar a administrar su Gracia.

Robo una frase anónima: En la Comodidad no se ve la Necesidad.